Malestar en la Guardia Civil por el uso de su informe sobre el presidente de Murcia

Su papel no es pedir imputaciones de nadie, lo que es competencia de los jueces y fiscales, sino presentar informes con sus conclusiones y las pruebas en las que se basan

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, instructor del caso Púnica EFE

Pablo Muñoz y CRUZ MORCILLO

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil está muy molesta por el papel que algunos quieren atribuirle en las investigaciones de la opinión Púnica y en otras en las que hay implicados políticos de distinto signo. La gota que ha colmado el vaso fue la información difundida en el sentido de que agentes adscritos a esa unidad habían «pedido» al juez la imputación del presidente de Murcia, el popular Pedro Antonio Sánchez.

L a UCO no pide la imputación de nadie -entre otras cosas porque no es su cometido- sino quepone a disposición del juez intructor, en este caso Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional, el resultado de unas investigaciones que, además, es el propio magistrado quien las dirige.

De hecho, la Policía Judicial, tanto de la Guardia Civil como de la Policía, lo único que hace es presentar los informes que se le piden a los magistrados o fiscales competentes con las conclusiones de sus pesquisas, y lógicamente aportan las pruebas en las que se basan las mismas.

A partir de ahí es el órgano judicial correspondiente el único que puede decidir si una persona pasa o no a la condición de investigado, según la terminología del último cambio legislativo. Así ha sucedido siempre y así ha ocurrido ahora.

El malestar en la UCO es notable, ya que se siente utilizada por algunos, tanto del ámbito de la judicatura como del político. Comentarios poco afortunados realizados en esos ambientes han llegado a oídos de la Guardia Civil , hasta el punto de que en esos círculos hay quien ha visto en su actuación alguna intencionalidad política.

Conviene recordar que la UCO ha realizado investigaciones en las que se han visto i mplicados formaciones de distintas tendencias , por lo que atribuirle ese tipo de conductas no deja de ser sorprendente.

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