Curri Valenzuela - CHISPAS

Los cobardes del PSOE

«Habría sido muy fácil que el viernes once de ellos se hubieran quedado en sus casas alegando cualquier indisposición»

Curri Valenzuela

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España tendría hoy Gobierno si once diputados socialistas se hubieran abstenido en la segunda votación. Habría sido muy fácil que el viernes once de ellos se hubieran quedado en sus casas alegando cualquier indisposición. Su grupo les habría impuesto una multa, pero sus escaños los tendrían garantizados aunque vuelvan a celebrarse las terceras elecciones. Quienes les ponen o les quitan de las listas del PSOE son esos barones regionales que tanto hablaban de terminar con el bloqueo. Unas palabras suyas habrían bastado para que sus supuestos deseos se convirtieran en realidad.

Si los periodistas nos saltáramos el secreto profesional y los dirigentes del PP la confidencialidad de sus conversaciones privadas, varios de esos barones quedarían reflejados como mentirosos compulsivos. Lo han sido. Durante semanas han estado pregonando como iban a convocar un Comité Federal, qué pasos iban a seguir para frenar a su secretario general. Y, por supuesto, criticando a Sánchez con frases hasta desagradables en términos privados. Su secretario general sonreía cuando le llegaban esas noticias.

«Les tiene tomada la matrícula», dicen en Moncloa. El propio Rajoy hace tiempo que comenzó a ignorar esos cantos de sirena que le llagaban de ministros y dirigentes del PP, «que sí, presidente, que fulanito garantiza que en última instancia te dejarán gobernar». Él mismo ha recibido llamadas de Felipe González , José Luis Rodríguez Zapatero o Alfredo Pérez Rubalcaba en los últimos meses, lo que no tiene nada de particular. Habla con ellos con frecuencia. Quienes mandan en Ferraz les consideran las viajas glorias que son. Su peso en las decisiones es nulo.

Susana Díaz , que estuvo desaparecida todo el verano, reapareció en público horas antes de la votación del viernes pero se negó a hacer declaraciones. Se esperaba mas de ella, aunque en el entorno de Sánchez se la considera incapaz de dar un golpe en la mesa. Unos creen que por falta de ganas y otros insunuan porque todavía no han acabado de publicarse las supuestas conexiones de su marido con los cursos de formación en Andalucía.

Guillermo Fernández Vara , partidario de un Comité Federal que aclarara el asunto, hizo su propuesta de convocatoria por la radio, no en Ferraz. Los presidentes de Castilla-La Mancha, Asturias y Aragón también han aparecido pidiendo el desbloqueo. A la hora de la verdad permanecieron mudos y consintieron que la culpa de la insólita situación que vivimos deje de ser la culpa de Pedro Sánchez. Lo es de todos ellos. Unos cobardes.

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