Rajoy estará volando hacia Madrid mientras Mas convoca la consulta del 9-N

El Gobierno ha querido transmitir tranquilidad, seguridad y contundencia estos días ante el desafío independentista catalán. Mariano Rajoy viajó el martes a Shanghái para iniciar una visita oficial a China, que se prolongará hasta el sábado, y ha dejado todo controlado en Madrid para que el Gobierno, presidido en funciones por Soraya Sáenz de Santamaría, actúe de forma inmediata contra la ley de Consultas y la convocatoria posterior . Este sábado, Rajoy tiene previsto visitar la Gran Muralla, un acto que comenzará a las nueve de la mañana (hora local, tres de la mañana española). Tras esta visita, emprenderá el regreso a Madrid, por lo que la convocatoria del referéndum de independencia que hará Artur Mas se producirá en pleno vuelo de Rajoy.

Hasta ahora era una incógnita los plazos que tenía en la cabeza el presidente de la Generalitat. A sabiendas de que legalmente su aventura no va a ninguna parte y será frenada de forma contundente por el Gobierno de la Nación, ha intentado jugar al despiste toda la semana con la fecha de la convocatoria de la consulta. Finalmente, ha anunciado que será el sábado , después de que el Diario Oficial de la Generalitat publique la ley de Consultas y esta entre en vigor.

Artur Mas no ha condicionado la agenda del presidente del Gobierno, que ha emprendido un viaje oficial a China que ya fue aplazado hace un año, y que tiene un altísimo interés para España y en concreto para la economía de nuestro país. Estrechar los lazos comerciales, aumentar las inversiones y reforzar la amistad entre los dos países son los objetivos de este viaje, que hasta ahora ha cosechado 14 acuerdos , con 4.000 millones de dólares directos a nuestra economía.

En este contexto, Rajoy ha querido cerrar su viaje oficial con una visita a la Gran Muralla. Será el sábado, según la agenda prevista, a primera hora. Tiene previsto aterrizar en Madrid aproximadamente por la tarde-noche, por el cambio de hora (seis horas menos en España). Si Artur Mas convoca la consulta ese día, en Madrid se encuentra la vicepresidenta, que podría iniciar el proceso para presentar un recurso de inconstitucionalidad que deje en suspenso la convocatoria. La respuesta del Gobierno no variará un ápice por el hecho de que Rajoy se encuentre fuera de España. Fuentes de la Moncloa han insistido en que ni existe un vacío legal ni la respuesta será menos firme, inmediata y contundente.