Dos días después de que el candidato del PPE a la presidencia de la Comisión, Jean Claude Juncker, apoyara la política de Mariano Rajoy sobre Cataluña, Artur Mas recibió ayer el respaldo del candidato de la Alianza de Liberales, el belga Guy Verhofstadt, que abogó por tener en cuenta de «una manera u otra» la «opinión expresada» de los catalanes.
Mas hizo su primera aparición en campaña, al margen del mitin inaugural, y lo hizo en busca de la complicidad de un líder europeo para tratar de trasladar una imagen de que no está solo y que su propuesta soberanista cuenta con aliados en la UE. «Es el momento de dar apoyo a nuestros amigos, sabiendo que defenderán nuestros derechos desde la óptica de los pueblos y no sólo desde la dinámica de los estados», dijo el presidente de la Generalitat.
El acto, junto al ex primer ministro belga fue la réplica a la foto de Rajoy junto a Juncker el lunes en Madrid. Sin embargo, el apoyo de Verhofstadt al derecho a decidir no fue al cien por cien porque si bien el candidato liberal apeló al diálogo entre los gobiernos de Cataluña y España, y reclamó que se respete la voz de la ciudadanía, su defensa no fue del todo explícita y en ningún momento pronunció las palabras ‘referéndum’ o ‘consulta’ sobre el futuro de Cataluña.
Además, ante la apelación de Mas de que respaldará las reivindicaciones catalanas, el dirigente flamenco no garantizó nada. «Creo que la UE no debe interferir en esta cuestión», dijo, aunque criticó el proceder del presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y de Juncker, muy críticos con el proceso. Se trata de una «cuestión entre España y Cataluña y espero que podamos progresar con diálogo», remató.
Mas, como en el mitin de inicio de campaña, insistió en que votar a CiU reforzará el proceso soberanista. «Si somos capaces de llenar las calles de gente cuando hay que dar apoyo a la causa nacional catalana, ahora que tenemos la oportunidad de pasar por las urnas para levantar nuestra voz en Europa, no podemos dejar pasar la ocasión», afirmó.
