![La campaña online de Michelle Obama y Ann Romney](/RC/201210/26/Media/A1-1810761630--647x300.jpg)
Michelle Obama, primera dama de Estados Unidos. / Scott Olson (Afp)
Hay películas que no serían lo mismo sin el buen hacer del reparto de secundarios, más allá de la actuación de los actores principales. Lo mismo pasa con las elecciones estadounidenses: no se entienden sin la fotografía de la familia al completo. Los nombres de Elvira Fernández o Pilar Goya pasan desapercibidos para la mayoría de los españoles, que pueden no saber que son las esposas de Mariano Rajoy y de Alfredo Pérez Rubalcaba.
En cambio, Michelle Obama y Ann Romney cuentan con muchas líneas de diálogo en el guión de las elecciones presidenciales estadounidenses. Y, por supuesto, esto tiene su reflejo en su presencia online. En unas elecciones como las actuales, donde es tan importante segmentar el mensaje por públicos, la labor de comunicación online de las mujeres de los candidatos se torna fundamental.
La ventaja de Michelle
En este escenario, Michelle Obama parte con la ventaja de haber ejercido de Primera Dama estadounidense. Su página oficial en Facebook
http://www.facebook.com/michelleobama cuenta con 8,6 millones de fans, casi dos millones menos que la página del candidato republicano Mitt Romney. En la misma, se intercalan los mensajes de apoyo a su marido con imágenes familiares de la familia Obama con sus dos hijas. También tiene una cuenta en Twitter, @MichelleObama, con casi dos millones de seguidores, 400.000 más que el perfil de Mitt Romney. La cuenta en esta red social está gestionada por el equipo de campaña de Barack Obama y los tuits escritos por Michelle están firmados con sus iniciales "MO". La mayoría de tuits pertenecen al equipo y, en los mismos, se anima a seguir colaborando con la campaña de Obama. Su 'timeline' tiene espacio incluso para otro miembro familiar más, Marian Robinson, la madre de Michelle, que da sus razones de
por qué va a votar por su yerno.
Michelle completa su presencia en las redes sociales con su cuenta en
Pinterest, la red social de moda en 2012 en Estados Unidos, donde los usuarios suben imágenes que les interesan y las organizan por tableros. La red, que tenía a mediados de junio cerca de 10,4 millones de usuarios, es estratégica para segmentar mensajes para el público femenino, ya que el 80 por ciento de sus usuarios son mujeres. El perfil de Michelle es seguido por 43.971 seguidores y sus imágenes están organizadas por estos temas: Por qué votamos, Personas que me inspiran, Recetas, En la Casa Blanca, Grandes Recuerdos y Familia.
Ann Romney, la esposa del candidato republicano se encuentra, en cuestión de cifras, a gran distancia de Michelle. En el caso de Ann, también ha elegido concentrar su presencia en Facebook, Twitter y Pinterest. Su
página oficial en Facebook cuenta con casi 400.000 fans. En su perfil, destaca sus referencias a la familia: "Madre de cinco hijos. Abuela de 18 nietos" y parece, ya que no se indica lo contrario, que lo gestiona personalmente, a diferencia de Michelle. Sus 'posts' se centran sobre todo en pedir apoyo para la campaña de Mitt.
En Twitter, Ann tiene un perfil, @AnnDRomney, con 153.726 seguidores. La descripción de su cuenta vuelve a resaltar su faceta familiar. Ann gestiona personalmente su Twitter y esto se traduce en una frecuencia de publicación más baja comparada con el de Michelle. En
Pinterest, Ann tiene 13.144 seguidores y sus la agrupación de imágenes por tableros nos presentan una persona familiar, interesada en la lectura, la gastronomía y patriota: Recetas para el 4 de julio, Artesanía, Cosas que me gustan, Patriótico, Inspiración, Familia, Recetas, Campañas y Libros que merece la pena leer. Ha participado también en el
blog de campaña con una semblanza sobre su marido.
Pero Ann no es el único familiar de Mitt con presencia en las redes sociales. Uno de sus hijos, Tagg, además de contar con una cuenta muy activa en Twitter, @tromney, firma mails de campaña.
Esta presencia online de las dos candidatas continuará tras las elecciones por la importancia de su actuación. Solamente queda por saber si a partir de enero, veremos la continuación de una saga o asistiremos al estreno de una película diferente.