Impacto de los 20 años de Orange en Andalucía

Orange ha invertido más de 5.500 millones en Andalucía

La operadora cumple veinte años en la región, donde genera más de 6.000 empleos directos e indirectos

Luz Usamentiaga, Carlos Ortiz Bru, Rafael Catala y Jose Bono surante el acto celebrado ayer en Sevilla Rocío Ruz

M. J. P./E. F.

La operadora de telecomunicaciones Orange presentó ayer en Sevilla un informe sobre el impacto en Andalucía de los 20 años de liberalización de las telecomunicaciones en España elaborado por Deloitte, que cifra en 5.500 millones de euros las inversiones acumuladas durante dos décadas de actividad de la compañía en la región. El estudio estima que de este volumen de recursos, 3.778 millones (casi el 70%) corresponden a la repercusión en la comunidad autónoma, en base a su población, de la adquisición de compañías por parte de la operadora de matriz francesa. Por otra parte, Orange ha destinado 1.645 millones al despliegue de redes en Andalucía y 136 millones a la compra de licencias de telecomunicaciones.

Dentro del capítulo de redes , la inversión en 4G (la cuarta generación de tecnologías de telefonía móvil), alcanza los 427,8 millones de euros, lo que proporciona una cobertura en la comunidad autónoma del 96,80%, según los datos facilitados ayer.

En el terreno laboral , Orange tiene una plantilla de 150 trabajadores en la región, aunque el informe de la consultora calcula que su actividad genera un total de 6.242 puestos de trabajo entre directos e inducidos.

En la presentación del estudio participaron Carlos Ortiz Bru, consejero de Comunicaciones de la Representación Permanente de España ante la Unión Europea, así como los exministros de Justicia y Defensa de España, Rafael Catalá y José Bono.

Atomización del sector

Ortiz Bru lamentó que el intervencionismo de los estados haya impedido fusiones de compañías, lo que ha propiciado una atomización del sector de las operadoras de telecomunicaciones. También cargó las tintas sobre la Unión Europea y sobre José Manuel Durao Barroso, quien fuera presidente de la Comisión Europea, por no hacer nada al respecto. Por contra, echó flores a Jean-Claude Juncker, actual presidente de la Comisión Europea, por la estrategia digital acometida desde su llegada al cargo en el año 2014.

Rafael Catalá abogó también por modificar los marcos regulatorios europeos porque, dijo, el mercado es ahora global y se necesitan las mismas reglas de juego para todos los operadores. Por su parte, José Bono , que se encuentra en pleno proceso de promoción de su nuevo libro, confesó en el acto no tener gran idea sobre el sector de las telecomunicaciones.

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