La pandemia entorpece los planes en el exterior de Renfe
El operador reconoce que los proyectos en Arabia y EE.UU. se están viendo afectados
El mercado exterior se ha convertido en una de las obsesiones de Renfe. El operador ferroviario pretende diversificar su operativa para que el 10% de sus ingresos proceda del exterior en 2030 . Y para lograr el objetivo, ha ampliado su punto de mira, buscando proyectos en México y los países bálticos.
Son destinos que se unen a otros, como África , donde la compañía pública pretende dar soporte y realizar estudios técnicos previos a trabajos de Cercanías. O Francia , un mercado en el que está muy atento a las posibles licitaciones de servicios de obligación pública (osp) y en corredores de alta velocidad como el Lyon-Montpellier y el Lyon-Marsella.
Pero todos estos proyectos quedan condicionados por la evolución de la pandemia . Al igual que ocurre con los proyectos internacionales que se encuentran en una fase más avanzada, como el AVE a La Meca y el AVE a Dallas. En el primer caso, la fase preoperacional en la que se encuentra el proyecto desde octubre de 2018, se interrumpió en marzo, cuando las autoridades saudíes suspendieron la movilidad por la propagación del virus. En realidad, l os trenes ya circulaban casi vacíos cuando llegó este anuncio, porque las peregrinaciones se habían suspendido antes.
La intención de Arabia Saudí era retomar las operaciones en septiembre. Incluso se barajaba la opción de que a partir de agosto se pudieran ya comprar billetes. Sin embargo, los nuevos rebrotes del coronavirus han obligado a posponer ese plazo.
La reactivación de la línea no tiene fecha prevista, si bien se espera que se produzca antes de que finalice el año. Renfe negocia una compensación con las autoridades «por la paralización y el mantenimiento de los recursos disponibles para que la reanudación pueda ser rápida», tal y como recogió la compañía pública en sus cuentas anuales. Dado que este importe dependerá del tiempo en el que esté parado el tren, Renfe aún no ha calculado el impacto económico que tendrá la crisis en su actividad en Arabia Saudí.
5.100 millones de euros
La crisis sanitaria también ha tenido su impacto en el AVE a Dallas. Texas Central Railroad, compañía que promueve el proyecto, ha notificado que la fase 1 del proyecto, que se refiere al diseño de la línea, se puede extender hasta mediados de 2021 , quedando retrasado hasta ese momento el cobro de los trabajos realizados por la entidad.
«No obstante, se continúa trabajando en el contrato de este proyecto en sus fases 2 y 3 , tal y como se firmó en los términos del acuerdo de negociación del contrato de operación y mantenimiento a finales de 2019», explica el operador en sus cuentas. Los planes de Renfe pasan por operar y mantener esta línea de alta velocidad hasta el año 2042. En la fase de diseño y construcción (hasta 2026) la compañía espera obtendrá 311 millones de dólares en concepto de supervisión y consultoría. Durante los años de operación y mantenimiento (entre 2026 y 2042) los ingresos esperados suman 5.611 millones de dólares. En total, 6.000 millones de dólares, unos 5.100 millones de euros.
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