El Covid-19 le cuesta 200 millones a las autoescuelas y el 35% de las ventas hasta abril al vino

La factura económica del coronavirus no deja de engordar y comienza a dibujarse bajo cifras dramáticas, que extienden el daño por todos los sectores y actividades como una gran mancha de aceite. En concreto, desde la Alianza de Empresarios de Peluquería de España se lanzó ayer un grito de socorro: para este año prevén perder hasta 1.280 millones de euros, el 44,4% de la facturación anual si nada lo remedia y, sobre todo, avisaron de que la pandemia pone en peligro la viabilidad de más de 20.000 peluquerías de toda España. En términos de empleo, según esta patronal, el 68,4% de las empresas optaron por un ERTE mientras y solo el 13,8% de las empresas prevén mantener su plantilla.

No es la única actividad «infectada» por el virus, ya que el s ector de las autoescuelas - con la paralización de los exámenes de la DGT- también avisó este martes de que el confinamiento ya les ha costado 200 millones de euros aproximadamente, unos seis millones diarios y dejado en el limbo a 130.000 alumnos que siguen formándose a distancia durante el confinamiento, según la Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Logística, Transporte y Seguridad Vial (Formaster). Además, desde esta organización, se señala que una mayoría de las autoescuelas han tramitado un ERTE sobre profesores y personal administrativo , aunque siguen asumiendo gastos como los alquileres y la financiación de los vehículos de prácticas, por lo que pidieron flexibilizar los pagos.

El desplome del Canal Horeca (hostelería) por el Covid-19 afecta gravemente al sector vinícola español, que ya comienza a hacer números y estima que la facturación caerá en casi un 35% entre enero y abril, según la Federación Española del Vino (FEV).

Todo ello, con más del 80% de las bodegas consultadas con problemas para exportar por el cierre de la hostelería en muchos países y, a pesar de que las ventas en el canal Alimentación y online crecen en lo que llevamos de confinamiento.

Como ha destacado José Luis Benítez, presidente de la Federación Española del Vino, «la situación es muy desigual en función del país» y ha mencionado los casos de China o Japón donde se estaría recuperando cierta normalidad contraponiéndola a la situación de países como Alemania, Reino Unido o Estados Unidos. «Las ventas en nuestros principales mercados están casi paralizadas» , sentencia el máximo responsable de la FEV quien recuerda que el sector sigue lidiando con los aranceles de Estados Unidos o el Brexit.