Bankia augura ganancias para sus accionistas del 70% tras la fusión con Caixabank aprobada hoy
La junta de la entidad controlada por el FROB da el visto bueno a la operación. El jueves será el turno para la del banco de origen catalán
Los accionistas de Bankia han dado el visto bueno a la fusión con Caixabank . La junta, celebrada hoy en Valencia, donde está la sede social, ha aprobado la operación para crear el mayor banco por activos en España con alrededor de 630.000 millones de euros. Un banco resultante que mantendrá su sede social en esa misma ciudad y contará con dos sedes operativas en Barcelona y Madrid, siendo esta segunda el centro principal de la firma financiera.
Fue hace más de dos meses cuando los consejos de administración de ambas entidades sacaron adelante la unión. Entonces, se pactó que Caixabank representaría el 74,2% del capital social y Bankia el 25,8% restante. La Fundación La Caixa , a través del holding Criteria, será el accionista mayoritario con un 30% de la empresa, seguido del 16% que ostentará el FROB , es decir, el Estado. Cabe recordar, en este sentido, que este último contará con una consejera dominical, Teresa Santero , con pasado político en gobiernos del PSOE a nivel regional y también en el de José Luis Rodríguez Zapatero a escala nacional.
José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, que será también presidente de Caixabank con funciones limitadas, no ha obviado que la operación, en buena parte, se debe a la pírrica rentabilidad de la banca en los tiempos actuales. Una situación que ya se arrastraba antes del Covid, pero ahora todavía más profunda por la pandemia. «La rentabilidad de la banca europea no sólo es muy baja, sino que se encuentra, desde hace varios años, por debajo de su coste de capital, algo que para cualquier sector o empresa no es sostenible en el medio plazo », ha señalado. Y entre las razones que explican ese escaso retorno ha destacado el terreno negativo de los tipos de interés, con «un efecto muy negativo sobre las cuentas de resultados de los bancos».
El dirigente ha recordado que la ecuación de canje de la fusión supone para Bankia una prima del 20% sobre la cotización de la entidad el día anterior al del anuncio, o del 28% tomando la media de los tres meses anteriores. Asimismo, más allá de estas cifras, ha añadido que «en términos de beneficio por acción, la entidad combinada alcanzará en el ejercicio 2022 un nivel de 0,33 céntimos por acción, lo que supone un 28% superior al nivel que obtendría Caixabank de forma independiente y casi un 70% superior al que obtendría Bankia». Un ejercicio de «vender» a los accionistas que con esta operación todos salen beneficiados .
Sin embargo, Goirigolzarri también ha reconocido que «todo proceso de integración conlleva cierto riesgo de ejecución». «Estimamos que seremos capaces de generar unas sinergias totales con la operación por un valor superior a los 1.000 millones de euros anuales», ha comentado. De esta cifra, 290 millones corresponderían al incremento de ingresos y otros 770 millones al ahorro de costes .
Los plazos de la operación
Los plazos continúan siendo los mismos. Ejectuar la unión a finales del primer trimestre del año que viene, y ahí empezar la integración de ambos sistemas y tecnologías, prevista para finales de 2021. Y ha recordado los trámites que aún faltan por pasar, más allá de que Caixabank apruebe la fusión también este jueves 3 de diciembre en junta de accionistas: «La decisión final es responsabilidad del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, que a su vez necesitará el informe previo, entre otros organismos, del Banco de España y del Banco Central Europeo, así como de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia».
A lo que no se ha referido en su discurso inicial Goirigolzarri ha sido al ajuste de personal que tendrá que hacer el nuevo Caixabank en 2021. Gonzalo Gortázar, consejero delegado de la entidad resultante, ya avanzó en la presentación del acuerdo hace más de dos meses que iniciarían las negociaciones con los sindicatos en el primer trimestre del año que viene. No dieron cifras respecto a de cuántas personas tendrán que prescindir, aunque fuentes financieras recalcan que estarán entre 6.000 y 10.000 trabajadores.
Los accionistas sí le han preguntado por ese ajuste de personal. Es ahí cuando el presidente de Bankia ha explicado que «en la medida de lo posible» se buscará que el máximo de las salidas de empleados sea por la vía voluntaria. Una tónica general en el sector, que estos últimos años ha acometido las bajas de trabajadores vía prejubilaciones y salidas incentivadas, y no a través de despidos traumáticos.
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