Eurocopa

Diego Llorente, otro positivo que angustia a España

Pasada la medianoche se comunicó que Diego Llorente también está contagiado y en Las Rozas hay miedo a un brote mientras se sigue debatiendo sobre la vacuna

Los partidos de la fase de grupos de la selección española

Llorente, el jugador infectado, en primer plano ABC / Vídeo: EUROPAPRESS

Enrique Yunta

España es un sinvivir, alterada por completo desde que el domingo se comunicó el positivo por Covid de Sergio Busquets cuando la jornada se consumía sin más. Ayer, pasada la medianoche, mosqueado el personal porque no había ningún tipo de comunicación por parte de la Real Federación Española de Fútbol, se informó de que Diego Llorente también está contagiado de Covid, un durísimo golpe a la delegación española y que dispara todas las alarmas. Quedan cinco días para que la selección debute en la Eurocopa ante Suecia y el escenario es angustioso, con el riesgo de brote presente mientras Luis Enrique recluta soldados por lo que pueda pasar. El torneo, sin que haya empezado, nace torcido mientras se sigue debatiendo sobre la vacuna que nunca llega .

A las 00.23 horas, el mensaje sonaba con más impertinencia si cabe en el teléfono móvil. «La RFEF lamenta comunicar que el defensa central Diego Llorente ha resultado positivo en los últimos test PRC realizados esta mañana en la concentración de la selección nacional en Las Rozas. El futbolista abandonará esta noche la concentración de la selección nacional en un vehículo medicalizado, siguiendo con todos los protocolos sanitarios establecidos», se leía en el texto. «La concentración de la selección nacional seguirá con todas las rutinas de trabajo establecidas en situaciones de Covid. Se mantendrán los entrenamientos personalizadas para continuar con la preparación del Europeo. Por su parte, los entrenamientos en Las Rozas de los jugadores en la burbuja paralela continuarán este miércoles a las 11.00 horas a las órdenes de Luis Enrique como respuesta a los contratiempos sufridos en los últimos días», decía el comunicado oficial. Para colmo, había un resultado indeterminado, pero no se notificaron más casos y el interminable día concluía a las 00.52 con un whatsapp colectivo: «Todos los jugadores de la selección nacional, a excepción de Diego Llorente, han resultado negativos».

Se complica muchísimo el escenario para Luis Enrique, quien ya tuvo que cambiar todos los planes cuando se supo que Busquets tenía el virus. El seleccionador planificó entrenamientos individualizados (al menos hasta el viernes) y ha llamado a seis futbolistas para que trabajen en esa burbuja paralela por lo que pueda pasar. Kepa se sumó ayer a Fornals, Carlos Soler, Brais Méndez, Rodrigo Moreno y Albiol, quienes ya fueron reclutados el lunes ante la sospecha de que se disparen los contagios en estos próximos días. Es una situación muy compleja y difícil de gestionar.

La noticia, además, llegó en un día muy convulso en el que no dejó de hablarse de la vacuna de la discordia. Parte de la sociedad está que trina al considerar un privilegio inexplicable que los jugadores que participarán en la Eurocopa se salten la lista y otro sector opina que esos futbolistas están al servicio del país y deben ser tratados desde ese sentimiento tan patriótico que despierta el deporte. «No se vacuna a futbolistas, sino a la selección española», defendía José Manuel Rodríguez Uribes , ministro de Cultura y Deportes, justificando así «una excepción» que genera muchísima controversia. En cualquier caso, la Comisión de Salud Pública, que supuestamente debía aprobar por la tarde la vacunación colectiva del equipo, del cuerpo técnico y del resto de miembros de la expedición (51 en total), declinó pronunciarse al respecto y pasó la patata caliente al Gobierno y la pelota quedaba en el tejado de Sanidad. Todavía no hay luz verde, un galimatías.

Mientras, llegaban desde Suecia los positivos de dos de sus jugadores , otro contratiempo a cinco días del duelo entre España y los escandinavos en La Cartuja. El extremo Kulusevski y el centrocampista Svanberg están contagiados y hay miedo a que se produzca un brote. Suecia, que queda muy tocada, deberá guardar cuarentena y se disparan las críticas y el malestar una vez se ha sabido que los jugadores tuvieron dos días libres para consumir fuera de la burbuja.

El miedo se dispara. Hoy, más pruebas PCR mientras Luis Enrique busca soluciones a una papeleta dificilísima.

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