La resurrección del histórico Castellón

Hace tres meses, a mediados de junio, el Castellón era un equipo fantasma que solo respiraba a través del corazón de sus aficionados. Con un presidente desaparecido y repudiado por la hinchada, la eliminación en el playoff de ascenso a Segunda B en el campo de la Peña Sport parecía la sentencia de muerte para una entidad asfixiada por las deudas. Pero aquel partido en el Estadio San Francisco cambió el rumbo de una entidad que ha revivido y ha devuelvo la ilusión a su hinchada. El domingo, en su primer duelo de Liga de la temporada en Castalia, diez mil seguidores arroparon a los jugadores albinegros . Un lujo para una categoría tan familiar como es la Tercera división.

A pesar de las dificultades deportivas e institucionales vividas el pasado curso, el histórico Castellón , una entidad fundada en 1922 que llegó a militar once campañas en la élite del fútbol español, lograba clasificarse para los playoff de ascenso a Segunda B. Un milagro para un equipo que se quedaba sin entrenador el 31 de diciembre a pesar de encadenar 16 jornadas seguidas sin conocer la derrota que habían catapultado al conjunto albinegro a los puestos altos de la tabla. David Cruz, entonces presidente, prescindió de Frank Castelló , que en junio regresaba al cargo después ganar el juicio con el dirigente por despido improcedente. La situación que atravesaba la entidad castellonense a finales de año era tan estrambótica que el preparador se tuvo que despedir desde la mesa de un bar ante la negativa del presidente a abrir las puertas de la sala de prensa de Castalia

Conseguir entrar en la categoría de bronce era la única huída adelante para un club lastrado por su deuda con Hacienda , pero un dramático final de partido ante la Peña Sport dejó al Castellón sin premio y a su afición con apenas un hilo de esperanza sobre el futuro del equipo en el que han jugado futbolistas de la talla de Vicente del Bosque . Pero aquella derrota, lejos de suponer el hundimiento, supuso el inicio de la resurrección. David Cruz, después de meses sin dar señales de vida y ajeno a la petición unánime de la hinchada, presentó su dimisión tras la decepción en Tafalla . Sus sustitutos han levantado el ánimo, aunque los problemas económicos no han desaparecido. Los hinchas miran ahora con optimismo el futuro.

Dos exfutbolistas de la entidad, Pablo Hernández y Ángel Dealbert , con la ayuda de reputados empresarios, como Vicente Montesinos , ahora en la presidencia, han rescatado a un Castellón que el domingo vencía al Buñol y aparece al frente de la clasificación del Grupo VI de Tercera división. La ilusión ha regresado a Castalia y 10.000 aficionados acompañaron a su equipo en ese partido. Una asistencia que pocas veces se puede ver en campos de Segunda B y superior a algunas de las entradas en recinto de la categoría de plata.

La respuesta masiva de los seguidores albinegros ha animado a Dealbert a volver a defender la camiseta del equipo en el que estuvo ocho temporadas antes de fichar por el Valencia y permanecer los dos últimos cursos en el Lugo. La fiebre por el Castellón no para. Con casi 9.500 socios , la meta ahora es superar el techo que consiguió la entidad con el último ascenso a Segunda división, en la temporada 2005-06 (10.500 afiliados). El récord de socios en Tercera, sin embargo, está en posesión del Real Oviedo en su última campaña en esa categoría, cuando llegó a 12.700.