Laporta revoluciona el fútbol base del Barcelona

Sigue Joan Laporta remodelando profundamente el club. Lo ha hecho en la parcela de los ejecutivos de la entidad y también en las secciones, donde ha provocado el relevo de Xavi Pascual como entrenador de balonmano y también de David Barrufet como director deportivo o de Andreu Plaza como técnico del equipo de fútbol sala. Ahora ha puesto su punto de mira en el fútbol base. Hace unas semanas ya remodeló la estructura ejecutiva de la Masía, pero ahora ha ido más allá y ha decidido destituir a García Pimienta , entrenador del Barça B, que esta temporada firmo una muy buena fase regular en la segunda B pero que fue apeado de las opciones de ascenso en la primera eliminatoria. Aureli Altimir a, responsable del fútbol base, y Álex García , del Departamento de Observadores, tampoco continúan. El futuro de Jordi Roura también está en el aire. «El FC Barcelona ha comunicado a Francisco Javier García Pimienta que rescinde su contrato . El club expresa públicamente su agradecimiento a García Pimienta por la profesionalidad, el compromiso, la dedicación y el trato siempre positivo y cercano que mostrado siempre hacia todos los estamentos que conforman la familia azulgrana, y le desea suerte y éxitos en el futuro», reza el comunicado con el que la entidad ha dado a conocer la decisión.

Además, hay que añadir que esta tarde también se ha hecho pública la destitución de Guillermo Amor , que era el director de Relaciones Institucionales y Deportivas del club catalán. Referente de la Masía, había ejercido dicha función desde octubre de 2017 haciendo de portavoz del club después de los partidos del primer equipo y en eventos como sorteos de Champions League y Copa del Rey. Amor llegó a los 13 años de Benidorm y fue un referente de la Masia. Debutó en 1988 con el primer equipo, con el que disputó 421 partidos oficiales hasta 1998 y conquistó una Copa de Europa, cinco Ligas, dos Recopas, dos Supercopas de Europa, tres Copas del Rey y cuatro Supercopas de España. Regresó al club con Joan Laporta como presidente como director de La Masia y la Ciutat Esportiva.

No deja de sorprender la destitución de García Pimienta, ya que se había cumplido la cláusula de su contrato por la que podía seguir siendo durante una temporada más entrenador del filial. De hecho, durante los últimos meses había sonado como el relevo natural de Ronald Koeman si la actual directiva decidía prescindir de los servicios del holandés. No obstante, este mismo viernes, Laporta y Alexanko le han comunicado la determinación de la junta directiva, respaldada por la dirección deportiva. Sergi Barjuán se perfila ahora como el próximo entrenador del filial . De hecho, durante la tarde de este viernes podría hacerse oficial el acuerdo que están acabando de perfilar. Barjuán fue uno de los jugadores del Dream Team que apoyó a Laporta durante las elecciones y tenía reservado un papel para hacer de enlace entre el fútbol formativo profesional y el primer equipo, sin embargo ahora cuenta con muchos números de ser el nuevo técnico del filial. El exlateral ya fue entrenador en las categorías inferiores del club azulgrana dirigiendo al Juvenil B en 2009 y también fue el máximo responsable técnico del Recreativo de Huelva y el Almería. Posteriormente dirigió también al Mallorca y tuvo una experiencia lejos de casa como entrenador del Hangzhou Greentown chino.

De esta forma, García Pimienta acaba una etapa importante en la cantera del Barcelona. Empezó su vinculación hace 19 años en el Cadete A. Su primer título importante fue en 2018, cuando conquistó la Youth League con el Juvenil. Ese titulo le permitió llegar al filial, que ha disputado la promoción de ascenso los dos últimos cursos. Bajo sus órdenes han estado futbolistas como Messi. La versión del Barcelona es que, a pesar de su buen trabajo en el filial, García Pimienta ha sido incapaz de lograr el ascenso en dos temporadas consecutivas . En verano del año pasado fue el Sabadell el que apartó a los azulgranas de LaLiga Smartbank, mientras que en el presente curso fue la UCAM Murcia el que acabo con el sueño culé tras una tanda de penaltis. Además, según fuentes consultadas por este diario, el club considera que el salario de García Pimienta es demasiado elevado y no se corresponde a lo que debería ganar un entrenador de Segunda B. No obstante, el club deberá indemnizar al entrenador, al que aún le restaba un año de contrato.