Críticas y descontento en los descartados por el Barça

La situación económica del Barcelona ha provocado que el club azulgrana forzara una limpieza en su vestuario con el objetivo de minimizar su crisis y rebajar la masa salarial . Durante el último día de mercado se cerraron varias operaciones que aligeraron su plantilla, aunque varios de los futbolistas que se han visto obligados a salir han mostrado ahora su malestar, al sentirse engañados o presionados. El último en abandonar el Barcelona ha sido Miralem Pjanic , cedido un año al Besiktas ante la perspectiva de quedarse un año sin jugar, algo que le advirtió Koeman para invitarle a aceptar alguna de las ofertas que tenía. El cierre de mercado de las grandes ligas le pilló sin que ningún club pudiera asumir sus pretensiones económicas (su ficha es de 15 millones de euros) y al final ha acabado aceptando la oferta de la liga turca, que cerraba sus inscripciones un día más tarde. El futbolista, que desde que llegó el año pasado ya mostró su disconformidad por disponer de escaso protagonismo, no se ha mordido la lengua a pesar que, en teoría, debería regresar a la disciplina culé el próximo 30 de junio, ya que le quedarán dos años más de contrato.

«No he tenido una posición clara. He estado realmente... a lo mejor podía entrar a veces cinco minutos, diez minutos... o calentar 45 minutos y no jugar... Nunca pasé algo así. No era fácil. Tienes que ser duro, lúcido, porque a veces puedes reaccionar mal con el entrenador , es así el fútbol. Pero siempre he sido muy respetuoso, delante de él pero también con los compañeros. Cualquier jugador al que preguntes te dirá que siempre entrena bien, trabajaba, iba los días libres para no perder la forma, pero para él ya me había hecho la cruz desde el inicio», explica el bosnio desde la concentración de su selección nacional . En una conversación con Marca, Pjanic carga duramente contra Koeman: «Todos tienen sus cosas diferentes, es normal, pero hay que comunicar, por el bien del equipo. 'No, no, Miralem, es solamente rotación, no tengo ningún problema, tu actitud es buena...'. Bueno, vale, bien, pero después me iba dejando más tiempo fuera. No entendía el porqué, creo que podría ser un buen jugador, pero también un buen compañero para el equipo, tengo una actitud profesional. Estaba trabajando los días libres, a veces me iba a correr solo tras los entrenamienos para estar bien... Podía dar mucho más si él quería. Pero es un entrenador muy, muy, muy extraño , es la primera vez que he visto una gestión así», añade. Y asegura que Koeman le ha faltado al respeto, aunque también deja claro que no se arrepiente de haber fichado por el Barcelona.

También Emerson Royal se ha ido desencantado, forzado a un traspaso un día después de su primera titularidad y tras haberle asegurado que sería un futbolista en el equipo. Aunque las condiciones económicas obligaron a priorizar a la directiva., que le convenció para marcharse al Tottenham. «Me dolieron las formas del Barça. Pudieron ser de otra manera . Había mejores formas de arreglar las cosas. Me estaban diciendo que tenía que irme sí o sí. Cuando llegué estaba seguro que el Barcelona no quería venderme, pero viendo lo que ha pasado tengo claro que cuando me ficharon ya tenían en mente la idea de venderme», ha lamentado el brasileño, que prosiguió con su queja: «Yo pensaba que el club quería que me quedase. Jugué el domingo de titular, al día siguiente me desperté y me fui a entrenar tranquilo. Ahí ya empecé a ver que salían un montón de cosas; que el Tottenham hablaba con el Barcelona, que lo tenían casi hecho... Yo no entendía nada de lo que estaba pasando porque no sabía nada. Por la tarde me llamaron del club para que fuera a la Ciudad Deportiva porque querían hablar conmigo y ahí ya me enteré de que me querían vender ». Y desveló la reunión que mantuvo con el club: «Me encontré con los dirigentes del club. Me empezaron a contar que la situación del club no era buena, que atravesaba un momento complicado y que para ellos era mejor vender. Yo les repetía que mi intención era quedarme porque tenía la ilusión de jugar aquí y aportar cosas al Barcelona. Sabía que si estaba en mi mejor forma iba a triunfar aquí. Yo soy listo y llegó un momento en el que me di cuenta que me estaban diciendo que me fuera sí o sí. Me estaban echando con muy buenas palabras ».

Aunque es un caso diferente, también Ilaix Moriba mostró su malestar. El canterano decidió marcharse al Leipzig ante la postura del club, que le apartó del equipo por no aceptar la propuesta de renovación y ante la posibilidad de marcharse libre el próximo año. El futbolista incluso recibió las críticas de Koeman, que aseguró sentirse decepcionado porque había preferido el dinero a jugar. Ilaix rompió su silencio tras firmas con el Leipzig. «Los últimos meses han sido lo más difíciles de mi vida, hemos recibido mensajes feos pero hemos podido aguantar para poder estar aquí, no me merecía esos mensajes. Se han dicho muchas cosas que no son ciertas y nos tuvimos que mantener callados por el respeto que le tenemos al Barcelona, cosas que se han dicho en la prensa no han sido de juego limpio, se han dicho muchas mentiras», denunció. «Lo más importante es que estamos aquí y estoy contento por todo lo que he mejorado en el Barcelona, por el respaldo de la afición aunque en los últimos meses algunos no han sabido comportarse . No voy a juzgar a la afición por esa gente. Al Barcelona siempre lo tendré en mi corazón, han sido meses complicados pero ya se ha tranquilizado y le deseo lo mejor al Barcelona y a todos los jóvenes, especialmente a Ansu, he visto que le han dado el diez y es el indicado para llevarlo y le deseo lo mejor», añadió. Y concluyó: «Me costó bastante dejar el Barcelona porque llevaba muchos años, toda mi vida. Ha sido difícil pero la oportunidad que me da el Leipzig creemos que es la mejor decisión que podíamos tomar. Quiero estar aquí y empezar a jugar».