El Barça juega sin red ante el Cádiz y con Koeman en el alambre

Partido trascendental para el Barcelona y su futuro inmediato. Acostumbrado a pelear por títulos y alcanzar finales, el equipo azulgrana se juega esta noche buena parte de su proyecto ante el Cádiz , que puede agravar la crisis interna en la que vive instalado el club. No es buena la situación deportiva, pero mucho menos lo es la institucional, con luchas intestinas y reproches entre Laporta y Koeman, que ha estado transitando por la cornisa desde que el presidente tomó posesión de su cargo. Se sabe sentenciado desde que el dirigente le pidió quince días para buscarle un sustituto este pasado verano y ve cerca su final tras las derrotas consecutivas ante Bayern y Granada, esta última inesperada. El pulso entre ambos, acrecentado tras la decisión de Koeman de leer ayer un comunicado en lugar de ofrecer la rueda de prensa (pidió el apoyo del club con hechos y con palabras, descartó ganar la Liga y calificó de milagro conquistar la Champions) acelera el desenlace.

«Nosotros somos los responsables de gobernar el club, tenemos más información a la hora de tomar decisiones y tenemos que ponderarlo todo mucho más. Para nosotros no es un problema tomar decisiones de cualquier tipo, y si hay que tomarlas en un momento determinado, las vamos a tomar , de tipo económico, de tipo deportivo o de tipo social», aseguraba el presidente esta mañana en unas declaraciones a El Chiringuito, lo que constata la provisionalidad de Koeman en el banquillo. «Estamos con el entrenador, es el técnico del primer equipo del Barcelona y lo que queremos es que le salgan bien las cosas. Los entrenadores, no sólo Koeman, están muy condicionados por los resultados y en el caso del Barcelona, por el juego. Pero Koeman es nuestro entrenador y estamos hoy con él », trató de suavizar, aunque una de sus máximas es la frase que soltó durante la toma de posesión: «Conmigo, perder tendrá consecuencias». No obstante, a Koeman ni siquiera le vale con ganar. Ni con ganar jugando bien. Está sentenciado y su futuro depende del tiempo que tarde la actual directiva en encontrarle un recambio de garantías.

No parece la mejor forma de afrontar un partido, al que se le suman numerosas bajas por lesión (Ansu Fati, Dembélé, Braithwaite, Agüero, Jordi Alba, Pedri...). Y el Barcelona no puede permitirse más tropiezos. Necesita los tres puntos para recuperar posiciones en LaLiga y no descolgarse de la zona alta de la tabla después del empate ante el Granada. Los azulgrana ya han cedido ya 4 puntos de los doce posibles y no se pueden permitir otro tropiezo. Hay que recordar que tienen aplazado el encuentro ante el Sevilla en el Sánchez Pizjuán. las bajas a la que se hacía referencia antes son el gran handicap con el que cuenta el técnico, que tiene un grave problema en el lateral izquierdo con la lesión de Jordi Alba y de Alejandro Balde . Lo más normal es que Mingueza actúe en banda derecha y Dest se desplace a la izquierda. Piqué, Araújo, Eric Garcia y Lenglet se repartirán las dos posiciones de central. En el centro del campo, con Busquets y Frenkie de Jong inamovibles, la tercera plaza se la rifarán entre Sergi Roberto, rehabilitado ya para jugar de interior, y el joven Gavi. En ataque, Memphis es el único fijo y entre Demir, Luuk de Jong y Coutinho se disputarán las otras dos plazas.

El Cádiz, por su parte, quiere aprovechar el momento de zozobra en el que se encuentra instalado el Barcelona y sumar una victoria que le catapultaría a la zona media de la tabla, empatado a puntos precisamente con el equipo azulgrana. Cervera podría repetir el once que ganó al Celta, aunque Lozano tiene problema en la rodilla, por lo que podría ceder su puesto a Negredo. La otra duda en el once está en el centro del campo, donde el técnico se debate entre Bastida, de 17 años, o Álex Fernández para aportar su experiencia. «Hay que saber que el Barça es diferente a otros años, tiene mucha peligrosidad, antes lo hacían por dentro y ahora por fuera. Sigo pensando que es un equipo muy peligroso, diferente. Puede hacer una alineación de once internacionales . Es el Barcelona y sigue siendo igual de peligroso», avisó el técnico del Cádiz, que tiene los pies en el suelo a pesar del mal momento culé: «Nosotros superiores no podemos ser. Podemos ser superiores en momentos puntuales. En aciertos nuestros y en errores de ellos. Si queremos ganarle en el juego a ellos, normalmente saldremos perdiendo. En momentos puntuales podemos ser mejores y nos agarramos a eso para ganar el partido».