Superliga
Una amenaza con efecto
La postura firme de la UEFA y la oposición de los gobiernos frena en seco a los clubes
Todo lo que rodea a la Superliga está cargado de polémica y ruido, agotadoras las últimas 48 horas que han estresado al mundo del fútbol. Desde que se anunció su nacimiento, pocos minutos después de la medianoche del domingo, se han sucedido los comunicados y las amenazas, especialmente contundentes las de la UEFA. En boca de Aleksander Ceferin , el máximo organismo del fútbol europeo advirtió a los 12 clubes fundadores y puso precio a lo que consideraba una traición: todo aquel que se sumara al proyecto de la Superliga sería excluido de las competiciones UEFA y los jugadores internacionales no podrían vestir la camiseta de su selección. Sería, además, una medida para ejecutar inmediatamente.
Con todo, esos 12 clubes que pusieron en marcha este proyecto se cubrieron las espaldas con antelación y presentaron el viernes, en el Juzgado de lo Mercantil número 17 de Madrid , una demanda precautoria, tal y como informó ABC. Daban por hecho que la UEFA reaccionaría vehementemente y de ahí que se plantease muy seriamente expulsar a las entidades rebeldes. Pero el mencionado juzgado madrileño aplicó medidas cautelarísimas por las cuales se prohíbe, en presente todavía porque sigue teniendo valor, a FIFA, UEFA y a todas sus federaciones y ligas asociadas «adoptar cualquier medida que prohíba, restrinja, límite o condicione de cualquier modo, directa o indirectamente, la puesta en marcha de la Superliga». Sin embargo, aunque la UEFA perdiera esa batalla, es obvio que su contundente postura y sus amenazas han frenado el ímpetu de este proyecto. También, claro está, la oposición frontal de los gobiernos, siendo el británico el más intransigente, y la reacción de las aficiones.
También estas medidas cautelarísimas dictaminan que queda prohibido tomar «cualquier medida sancionadora o disciplinaria contra los clubes participantes, su jugadores y directivos», algo que ya hizo saber Florentino Pérez en su entrevista en ‘El Chiringuito’: «Me preocupa que quieran echarnos, pero la ley nos protege».
Quizá ya no hará falta crear jurisprudencia, pero la UEFA, en cualquier caso, sabe que no puede actuar de inmediato en contra de los clubes implicados. en la creación de esta competición. «A mi juicio, Ceferin se pasó de frenada. Tuvo una reacción en caliente sin evaluar que este tipo de decisiones necesitan un respaldo legal. Una cosa es la reacción visceral de la UEFA y otra que hubiera decidido expulsar a estos clubes, algo que hubiera hecho de manera ilegítima. De haber sido así, estos podrían haber denunciado a la UEFA por tomar decisiones que no se acogen a la normativa y que, sobre todo, no respetan su derecho de defensa», explica a ABC Toni Roca, abogado y CEO de Himnus Football Lawyers , bufete especializado en derecho deportivo. Para poder expulsar o sancionar a un club, primero se necesita pasar un procedimiento disciplinario. Se abre un expediente, se permite un plazo para alegaciones y, en el caso de que haya una sanción, esta debe estar prevista en los reglamentos de UEFA.
Esta visión la comparte Juan de Dios Crespo , otro de los afamados abogados españoles en derecho deportivo: «No hay ninguna norma en el reglamento disciplinario de la UEFA que hubiera permitido la expulsión de la Champions de los equipos fundadores de la Superliga». Pero cuidado, no es tan tajante respecto a la próxima temporada. «La Champions del año que viene es otra cosa». En donde sí se ponen de acuerdo es en el tema de los futbolistas y sus selecciones. «En el caso de que se les quisiera sancionar, se haría de forma preventiva porque no han incumplido ninguna norma. Tú no puedes sancionar a un individuo por una infracción que todavía no has cometido. Esa sanción sería nula de pleno derecho», detalla Roca. «Otra cosa sería que se les retirara su licencia», explica Crespo.
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