Corrida «Made in Spain»
Decepcionante mano a pata de El Juli y Ventura en una tarde de gran ambientazo
El Juli es torero del pueblo, y al reclamo de la máxima figura la Chata respiraba un ambientazo descomunal. Y eso que en el cartel faltaba el lesionado Talavante, uno de los artistas más apetecibles de la temporada. Julián decidió tirar del carro y se alistó con sus dos toros y los de su compañero, en un cartel que abrió Diego Ventura, figura del rejoneo. Pero ocurrió algo muy «made in Spain» : tarde de expectación, tarde de decepción. El único trofeo lo paseó el caballero, mientras que el acero se llevó el premio del matador con un conjunto de Garcigrande/Domingo Hernández desagradecido y de juego deslucido salvo algunas virtudes.
El primero de lidia a pie tuvo potable son por el izquierdo, por donde El Juli alargó las embestidas hasta el infinito, a veces tanto que marchaban hacia fuera. Se había doblado antes con sapiencia y abrochó con unos semicirculares que calentaron los tendidos , pero mató mal y perdió un trofeo seguro. Con el gacho y noble tercero echó ambicioso las rodillas por tierra. Ligazón sobre la derecha en un espacio milimétrico. Y soberana quietud sobre la zurda. Superiores dos profundos pases de pecho hasta la hombrera contraria tras unas luquinas, pero la espada fue su cruz... El quinto, apenas picado y con un mitin de la cuadrilla, fue una joyita: rebrincado, geniudo y desclasado se metía por dentro. Firmeza del torero, como en el brusco sexto, de cero clase y para colmo frente a un molesto viento.
Un alboroto formó Ventura en el inaugural , al que enceló magistralmente con unos circulares en el platillo. Para redondo el de Nazarí, genial a dos pistas. Vaya caballo, gran exponente de todas las cuadras. Enseñorea temple y valor, con una torería cuadrúpeda que ya quisieran algunos bípedos. El cuarto era un manso de enciclopedia que intentó saltar al callejón y con el que puso toda la carne en el tostador. Lo emborronó en la hora final.
Decepcionante mano a pata. Faltan los de Nimes y Zaragoza ... Los duelos, mejor sin mixtos.