Elina Garanca y su marido piden que el Teatro de la Zarzuela siga siendo «público y accesible»

El Teatro de la Zarzuela ha vivido este domingo la primera reivindicación en contra de la intención del Ministerio de Cultura de fusionarlo mediante un decreto con el Teatro Real bajo el paraguas de una única dirección. La mezzosoprano letona Elina Garanca y su marido, el director Karel Mark Chichon, han aprovechado los instantes finales de su recital para pronunciarse públicamente en favor del género de la zarzuela y del carácter público del teatro de la calle Jovellanos.

Desde el podio, y junto a Garanca, Chichon ha reconocido que tanto él como su mujer «amamos la música española, especialmente la zarzuela, y es por eso que la llevamos a todas las parte del mundo». En el repertorio de recitales de la mezzo es habitual que regale, entre las propinas, piezas del género lírico español. «Por eso es nuestro deseo que este gran teatro siga defendiendo este género tan español y tan único que es la zarzuela».

Director y solista han querido transmitir «todo nuestro apoyo a este teatro y a su equipo humano, que nos ha tratado como una familia durante toda esta semana», y han deseado «que este teatro siga siendo público y accesible para todos, popular y abierto como lo fue siempre hasta ahora» . Chichon vio interrumpida esta última parte de su alocución por los aplausos y bravos de los aficionados presentes, que han coreado gritos de «público, público» , con el coro de la Zarzuela puesto en pie aplaudiendo, secundado por los músicos sobre el escenario.

Garanca coronó las palabras de su marido con un sonoro «¡Viva la Zarzuela!» respondido por el emocionado público que llenaba el teatro. El Gobierno va a necesitar mucha pedagogía para convencer a un sector de los aficionados y el gremio de artistas de las bonanzas de esta fusión por absorción.