Bunbury: «Si la gente no puede ganarse el pan, habrá problemas»
El músico aragonés publica este viernes su nuevo disco, «Posible»
Minimalista, oscuro, denso, introspectivo y electrónico, en la onda de los trabajos más quirúrgicos de Mark Lanegan , «Posible» supone el enésimo manotazo al timón de Enrique Bunbury . Un giro que él mismo reconoce le ha costado dar, pero no porque no estuviera convencido de la dirección, sino porque no sabía exactamente cómo respondería su nave .
Así, el comienzo del proceso de grabación estuvo dominado por la incertidumbre, pero poco a poco la zozobra fue quedando atrás y el músico aragonés consiguió sentir de nuevo la refrescante brisa que sopla en los viajes hacia lo inexplorado . «Creo que la labor creativa mantiene el equilibrio entre la expresión y la comunicación», reflexiona el artista desde Los Ángeles.
«Conectar con los demás es fantástico y satisfactorio, al nivel que sea. Pero el motor de la música y cualquier faceta artística es la necesidad de expresarte, de vaciarte, o incluso, de conocerte . Creo que cuanto más inclinas la balanza hacia la comunicación, y más te importa llegar al público y que continúe a tu lado, menos te mueves de un territorio conocido y aceptado. En cambio, cuanto más inclinas la balanza hacia la necesidad de expresarte, más interesante y variada es tu búsqueda. Puede ser que me equivoque y que esta reflexión no sea acertada, pero es mi sentir ».
¿Cómo fue el trabajo de estudio con este enfoque, más orientado a lo digital que a lo analógico?
Intento enfocar el trabajo de diferentes maneras cada vez que empiezo un nuevo trabajo. Hace años, Phil Manzanera me sugirió: «Si quieres llegar a diferentes conclusiones , debes de cambiar el enfoque ». Así, cada vez que hay un giro importante en mi carrera, ha habido un cambio en alguno de los procesos, la composición, los textos, o los ritmos, o la grabación, o la tecnología utilizada o la metodología y logística.
En este caso, los dos principales cambios han sido por un lado teóricos y por otro lado en la postproducción . El aspecto teórico abarcaba desde la grabación, hasta las mezclas. Me gusta limitar el terreno a los músicos para enfocar mejor su trabajo. No todo vale. Una canción puede grabarse de mil maneras diferentes y hay que elegir cuál va a ser la que va a definir el disco que tienes entre manos. En este caso, el minimalismo era básico , por ejemplo.
«Este es un disco introspectivo, en el que lo personal prima sobre el mundo exterior, del que pretendo aislarme y evitar el contagio informativo»
«Deseos de usar y tirar» tiene un verso que muchos verán profético: «en un estado permanente de emergencia». Pero habla del estado de emergencia interior, en el que nos hemos sumido en estas dos últimas décadas de hiper-velocidad en todos los aspectos de la vida, de necesidades creadas, de falta de reflexión… ¿Verdad?
Bueno, lo grabé entre junio y noviembre del año pasado, así que no tenía ni idea de esta locura en la que se ha sumido el mundo. El álbum no tiene una mirada social . En oposición a mis dos discos anteriores («Palosanto», 2013 y «Expectativas», 2017), este es un disco introspectivo , en el que lo personal prima sobre el mundo exterior, del que pretendo aislarme y evitar el contagio informativo. «Deseos…» es una canción sobre la importancia y el valor del amor duradero, la constancia y la unión por encima de las circunstancias.
«Mis posibilidades» lleva la palabra «Interstellar» entre paréntesis. ¿La película le dejó huella?
Me gustó mucho la película . Siempre me han interesado la física cuántica y las realidades paralelas . Es lo más cercano que la ciencia se ha atrevido a estar de la espiritualidad. La canción habla de posibilidades y de mundos paralelos y la escribí con el recuerdo de algunas escenas de la película en mente.
«Como un millón de dólares» es de las más llamativas. ¿Qué desató su composición, y cómo fue su construcción musical?
Es una canción que he escrito junto a Robert Castellanos , el bajista de los Santos Inocentes. Empezó en modo country y fue evolucionando a este extraño lugar en el que pasa de todo . Cuando incorporé una «novena» en los acordes de la estrofa, se convirtió en algo mucho más interesante, creando una tensión maravillosa . El texto pertenece a lo que llamo el díptico de Los Ángeles, junto con «Mariachi sin Cabeza» que, aunque contiene referencias a Ciudad de México, también contiene un personaje deambulando por la ciudad.
«Siempre pretendo hacer el disco más oscuro de mi carrera y nunca estoy seguro de conseguirlo»
«Los Términos de mi Rendición» da la sensación de ser un cierre bastante singular, que en cierta manera se sale del espíritu sonoro de todo lo anterior. ¿Me equivoco?
No voy a contradecir tu apreciación porque seguramente es más válida que la mía. Desde que empecé a maquetar tuve claro que era la canción que iba a cerrar el disco. Siempre pretendo hacer el álbum más oscuro de mi carrera y nunca estoy seguro de conseguirlo. Creía que esta canción te sitúa en el lugar que deseaba para el sentimiento global del álbum. Un punto entre el desencanto , mezclado con cierta esperanza y unas gotas de indiferencia . Esa extraña mezcla de sentimientos me parecía adecuada para cerrar un disco de estas características.
¿Cree que es posible que los aspectos sonoros más «digitales» del disco generen un pequeño brote de haters talibanes del rock?
No lo sé. No pienso en ello. El problema de un talibán no es mío. Además, imagino que a lo largo de mi carrera solista he dado suficientes disgustos a los talibanes como para que no esperen nada de mí. No soy un músico de Rock ortodoxo , pero no con este álbum… no lo he sido en ningún momento.
¿El retraso de la publicación del disco tuvo que ver con el respeto al formato físico del álbum?
Hay que recordar que cuando nos confinaron en nuestras casas hablaron de dos semanas. No de tres meses. Así que un pequeño retraso en la salida del disco parecía lo más sensato . Cuando vimos que la cosa iba para largo, tomamos la decisión de que no se podía paralizar la vida y que, aunque todo iba a ser más difícil, no podíamos caer en el abandono.
Sus planes de gira evidentemente estarán parados, pero ¿está estudiando posibilidades para este verano/año?
Hemos cancelado todas las presentaciones en el año 2020 . Las diferentes noticias que llegan de los diferentes países por los que iba a pasar la gira, no son nada halagüeñas. Problemas en las aduanas , para carga y personal, reducción de aforos , distancias de seguridad… No son medidas racionales ni aceptables para el funcionamiento de un tour. Al menos de las características de los que hacemos nosotros. Así que, no nos queda más remedio que, contra nuestra voluntad, retrasar el tour y reubicar las fechas en 2021.
¿Tenía pergeñada una imaginería visual concreta para la puesta en escena en directo del disco?
Sí, claro. Y seguimos trabajando en ello y mejorando y dándole vueltas a cómo será. Ahora tenemos más tiempo y vamos a intentar hacer un show muy potente en todos los sentidos. Sonido y luces siempre han sido aspectos que hemos cuidado con esmero y cariño.
Su guitarrista Álvaro ha lanzado su propia carrera en solitario este año (qué mala suerte por ese lado), ¿cómo ha visto su debut?
Me encanta su disco. Un gran trabajo. De los discos que más me están gustado de los que han salido este año en nuestro idioma.
«El hambre está a la vuelta de la esquina. Colas kilométricas en los bancos de alimentos. El futuro es ya»
Los músicos de gira están entre los grandes damnificados del sector cultural por esta pandemia, ¿los suyos están muy angustiados?
Todo el mundo está angustiado. Podemos llorar y pensar solo en nuestro gremio, pero el problema es global y son muchos los millones de personas que se han quedado ya sin trabajo. Y, ¡tantos que pasarán directamente a la pobreza y a la miseria! El hambre está a la vuelta de la esquina. Colas kilométricas en los bancos de alimentos. El futuro es ya.
He intentado imaginarme un concierto de Bunbury en Instagram, y no consigo verlo… ¿se ha planteado hacer alguno?
No. Me parece que no tiene que ver con el espíritu del disco. Entiendo que entre todos tenemos que ayudarnos y aportar cada uno lo que pueda o sepa. En mi caso, he estado subiendo conciertos en alta calidad y gratuitos, cada fin de semana, de diferentes etapas de mi carrera. Además de ir sacando mensualmente una canción nueva.
¿Ve viable hacer una gira con todos los recintos a medio aforo?
En absoluto. Eso no va a suceder. Hago giras internacionales. Cuyo balance económico es milimétrico. Es muy complicado hacer giras por tantos países del mundo con todo el personal y la calidad técnica, como para que ahora pidan reducir a la mitad o un tercio las capacidades de los recintos. Es absolutamente inviable y poco realista. Supongo que habrá quien encuentre la forma de que les cuadren las restricciones. En mi caso, la “nueva normalidad” me chirría y me suena a algo con lo que debemos ser tremendamente cautelosos.
¿Cómo está llevando personalmente el confinamiento? ¿Ha pasado por algún momento de inquietud profunda?
Bien, bien. Gracias. Estoy acostumbrado a vivir encerrado, con mis cosas. Mis instrumentos, libros, películas, pinturas, cuadernos… Puedo sobrevivir en mi casa. Y he trabajado mucho en mi vida y no necesito el sueldo del próximo mes, afortunadamente. Pero soy muy consciente de que soy un privilegiado. Y ahora mismo, la empatía, solidaridad y compasión son absolutamente necesarias. Porque la gran mayoría está con el agua al cuello. O empieza ya a hundirse.
¿Qué es lo que más le preocupa de las consecuencias de esta pandemia?
El hambre y la violencia. Como no pueda la gente ganarse el pan, habrá problemas. Eso lo ve hasta un ciego.