LIBROS
«Heroínas»: catorce relatos que dan voz a las mujeres
Gómez-Jurado recopila y Pérez-Reverte apadrina este libro coral para el Día Internacional de la Mujer
Catorce relatos de otras tantas firmas han respondido a la llamada del madrileño Juan Gómez-Jurado , a fin de indagar en el alma femenina y bucear en las heroicidades cotidianas y «resiliencias» de mujeres de ficción que tienen mucho de real. El miércoles, en el Círculo de Bellas Artes, Arturo Pérez-Reverte y Leandro Pérez –cofundadores de Zenda–, la directora de Cumplimiento de Iberdrola, Dolores Herrera, y el secretario del Consejo de Administración de Iberdrola, Julián Martínez-Simancas –impulsores del proyecto–, apadrinaron el volumen «Heroínas», ilustrado por Franz Ferriz .
Para Pérez-Reverte , proyectos como «Heroínas» (Zenda) nacen «para ayudar a dar visibilidad a autores que lo merecen». Añadió que «el héroe literario del siglo XXI es la mujer. Su rol literario ha cambiado porque ahora las mujeres se enfrentan a desafíos interiores. Está claro que en este siglo van a cambiar las cosas». Por su parte, Gómez-Jurado , coordinador del volumen, recordó que Pérez-Reverte «es responsable de crear a la heroína de La reina del sur , Teresa Mendoza» y quiso lanzar «un mensaje a los escritores y escritoras: por favor, no dejéis de crear».
Pérez-Reverte, que como duelista «conradiano» lanza retos literarios aquí y acullá (ya ha logrado identificar a base de encuestas al escritor que representa mejor lo español en la literatura –Galdós– y anda indagando en la biblioteca perfecta –cien volúmenes más El Quijote–) da cumplimiento a la cita del Día Internacional de la Mujer con este libro colectivo, violeta, feminista, reivindicativo, luchador...
En sus páginas, el lector podrá encontrarse a maestros consagradísimos de la narrativa, como Elia Barceló –cuya heroína se marcha en una nave espacial–, Lorenzo Silva –que desnuda el monstruo zafado en la red– o José María Merino –y las vueltas y vueltas de la incierta memoria de un terrible accidente–, con voces no tan conocidas pero importantes, como las de Karina Sainz Borgo, Bárbara Montes, Alaitz Leceaga o Blas Ruiz Grau, cuyo cuento sobre un psicópata y su víctima arroja un magnífico retrato de la mujer maltratada.
La heroína estelar de Barceló, la mujer astronauta Indira Chandra que se encontró con los «moai», lentos, longevos y meticulosos, con los que pasa veintidós años terrestres y vuelve para contarlo y transmitir un virus antimachista , abre este libro coral, en el que es inevitable que el lector se pregunte por qué aún el denominador común de las heroínas modernas es la resistencia o la lucha por su lugar, por restituir el equilibrio o la paz abolidos por el maltratador o el asesino.
Espido Freire , por ejemplo, traza el duro retrato de la sororidad y el sacrificio de una comunidad femenina en tiempo de guerra; Luz Gabás bucea en la compleja convivencia de dos amigas, Elba y Cora, que hacen justicia y celebran «el triunfo democrático del horror»; y el crítico Arturo González Campos cuenta casi en tiempo real la definitiva transición identitaria de Miguel a Mónica con un simple cambio de DNI, tras tanta incomprensión.
Completan el libro las aportaciones de Manel Loureiro, Raquel Martos, César Pérez Gellida, la citada Karina Sainz Borgo y Mikel Santiago , y todos coinciden en que importa el dolor y buscarle un sentido: así, sus relatos, a veces incómodos y siempre necesarios, sconstituyen la coartada perfecta para explicarnos que, en materia de igualdad, todavía queda mucho por hacer.