DARÁN QUE HABLAR
José A. Reyes: «Aporto un poco de frescura y humor, que tanta falta hace, tanto a la vida como al arte»
José Antonio Reyes entra y sale del mundo del arte. Se mete en él y se mete con él. Lo retuerce, lo pone contra las cuerdas. El resultado es una obra que destila ironía por todos los poros, de un pintor pintor con ganas de mancharse de pintura
Nombre completo: José Antonio Reyes González. Lugar y fecha de nacimiento: Olivares (Sevilla), 11 de marzo de 1976. Residencia actual: Madrid. Estudios: Licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla. Ocupación actual: Artista plástico.
Noticias relacionadas
Qué le interesa. Suelo trabajar en serie, exprimiendo una idea hasta sacar su máximo jugo. Mi obra habla sobre el propio mundo del arte, y para ello utilizo la ironía y el humor con los quepersigo llegar al espectador. Creo que no sabría ni podría hacerlo de otro modo. Me siento bastante cómodo utilizando el dibujo como herramienta principal para expresarme, aunque formalmente me gusta probar diferentes caminos.
De dónde viene. Individualmente he expuesto en dos galerías sevillanas: una, donde celebré mi primera exposición, fue la ya desaparecida Concha Pedrosa; la otra, Birimbao , dónde se presentaron por primera vez las series «Blood» y «Hablando de arte». Esta última serie también pudo verse en la Escuela de arte León Ortega de Huelva. Destacaría además la exposición «Toreo de salón. Un proyecto para Cataluña», en el Centro de Arte Tomás y Valiente de Fuenlabrada .
Supo que se dedicaría al arte… Desde el momento en que fui consciente de que había que dedicarse a algo. Entonces supe que me dedicaría al arte. Siempre que me preguntaban qué iba a ser de mayor, yo ya sabía la respuesta. Desde chico he disfrutado dibujando. En el colegio y en el instituto lo hacía constantemente. Recuerdo que dibujaba a mis compañeros y a los profesores en los papeles de los apuntes y en mi mesa de estudio. Ellos se convirtieron en mis primeros modelos fuera del entorno familiar sin saberlo. Cuando acababa la clase se solía formar algún que otro alboroto alrededor de mi mesa para ver al profesor de turno dibujado.
¿Qué es lo más extraño que ha tenido que hacer en el arte para «sobrevivir»? Pues lo más raro es seguir hoy con las mismas ganas y necesidad de contar cosas, yendo cada día al estudio. Y descubrir que todavía tengo cuestiones que contar… Aunque entendiendo por dónde va la pregunta. Diría que raro, raro, no he hecho nada. Impartí clases de pintura en mi pueblo, organizadas por el Instituto de la Mujer o algo parecido, y también solía ir a «malvender» mis pinturas y grabados a un mercadillo de arte que había, y creo que sigue habiendo, en la plaza del Museo de Sevilla.
Su yo virtual». Tengo un blog con mi obra bastante actualizado, aunque para el día a día utilizo Instagram (@joseantonioreyes) , donde voy subiendo obras de forma continua y me gusta curiosear lo que hacen otros artistas. También tengo Facebook, que utilizo sobre todo para comunicarme con mis compañeros de estudio. Además, estoy suscrito a los «newsletter» de varias páginas de arte, así como de galerías para estar al día de las exposiciones.
Dónde está cuando no hace arte. un espacio compartido, «La Nada», con otras nueve personas en el centro de Madrid. Formamos un grupo bastante heterogéneo, que no se comporta como colectivo, sino como una suma de individualidades que se ayudan mutuamente en los problemas que nos puedan surgir a diario.
Le gustará si conoce a... Siempre he disfrutado muchísimo con las vanguardias históricas, por lo que nombraría a Picasso, Modigliani, Soutine, Magritte o Manzoni como referentes. Destacaría también a Philip Guston y Lichtenstein. Contemporáneos a mí –y españoles–, me quedo con Eugenio Ampudia, Cristina Lucas , Matías Sánchez, Pilar Albarracín o Juan López, por citar algunos; y por cercanía y amistad, con Gerardo Delgado, Rodríguez Silva y José María Bermejo, todos ellos de mi pueblo. Además, añadiría a mis referentes los cinematográficos: Buster Keaton, Harold Lloyd y, por encima de todos, Billy Wilder.
Qué se trae ahora entre manos. Después de una etapa más conceptual, en la que mis obras eran puro textos –«escribía» más que pintaba: lo hice por ejemplo con la serie «Posabesos»–, necesitaba «mancharme», volver a la pintura pintura. Y lo he hecho jugando con ella, con la materia, con la forma, arrastrándola, pintando con espátulas, spray, jeringas... El resultado es una serie de maderas en pequeño formato llamada «Paisajes». En paralelo continúo con una serie en forma de diario dibujado llamada «Recuerdos».
Proyecto favorito hasta el momento. Cada serie que comienza uno lo hace con la ilusión de contar algo nuevo y de un modo nuevo. Si me tengo que quedar con alguna obra o proyecto en concreto, lo haría con la serie «Recuerdos», que comencé en septiembre de 2014 y que continúo haciendo a día de hoy. Se trata de un diario dibujado, justo antes de dormir, a cuatro colores y a oscuras, sobre los recuerdos de cada día. Puede que sea el trabajo que peor me define como artista y a la vez el más personal; y, por eso, el más difícil de descifrar.
¿Por qué tenemos que confiar en él? Yo, con mi trabajo diario, creo que aporto un poco de frescura y humor que tanta falta hace, tanto a la vida como al arte. No creo que esté inventando nada en el ámbito artístico. Me considero un artista de ideas, sin estilo formalmente hablando. Eso sí: prometo trabajo, constancia y dedicación.
¿Dónde se ve de aquí a un año? Nunca he mirado al futuro, ni lo he imaginado, ni pienso en exponer en tal o cual sitio. Eso creo que es consecuencia propia del trabajo. Lo único que deseo es seguir teniendo ideas que desarrollar y cosas que contar de manera interesante. Espero estar dando guerra en el estudio, con series de obras nuevas que me ilusionen.
¿A quién cedería el testigo de esta entrevista? Me gusta el trabajo de mucha gente. Pero por amistad y porque valoro sus aportaciones, cedería el testigo de esta entrevista al artista cacereño Alejandro Pajares , por lo concienzudo de su labor, y a la comisaria de exposiciones y crítica de arte granadina Regina Pérez, por su rigor y capacidad de trabajo.
¿Cómo se definiría en un trazo?