La Policía de Berlín pisa los talones al clan especializado en robos a grandes museos
Los Remmo son considerados responsables del robo de la Cámara Verde de Dresde, el mayor hurto de joyas de la historia de Alemania
![La bóveda de Dresde](https://s2.abcstatics.com/media/cultura/2021/01/06/boveda3-kThB--1248x698@abc.jpg)
Cuatro agentes de la fiscalía y un equipo de las fuerzas especiales irrumpieron la madrugada del martes en una vivienda de Berlín-Rudow. Registraron el apartamento, incautaron dos teléfonos móviles y varios documentos, pero no dieron con el hombre que estaban buscando, Abdul Majed Remmo . «Le pisamos los talones, es cuestión de tiempo», declaraba después un portavoz policial sobre el fugitivo, que encabeza la lista de «los más buscados» de Europol. Su gemelo, Mohamed Remmo , fue detenido en diciembre cuando conducía un automóvil de lujo, frente a un edificio de apartamentos en Jahnstrasse en el distrito de Neukölln de Berlín. Su primo Wissam ha sido condenado y permanece en prisión. Pero mientras siga en la calle el último de los Remmo seguirá sin ser desmantelado un clan criminal que ha encontrado una presa fácil en los museos alemanes.
Los Remmo son considerados responsables tanto del robo de la Cámara Verde de Dresde , el mayor robo de joyas de la historia de Alemania, como de la desaparición de la Big Maple Leaf , una moneda de oro de cien kilos de peso que custodiaba el Museo Bode de Berlín. Hasta hace solo dos años se dedicaban exclusivamente al comercio de droga y la explotación de prostitutas. Algo ha cambiado y ahora se interesan por bienes culturales de primer orden y de incalculable valor histórico. Ninguno de ellos hasta ahora ha podido ser recuperado.
El 13 de septiembre de 2018 fue enterrado en Berlín Nidal Remmo , de 36 años de edad, numerosos antecedentes policiales y asesinado en plena calle. Acudieron más de 2.000 personas, miembros de mafias de toda Alemania, incluso de otros países europeos, que mostraban así su respeto por el clan familiar de origen árabe que domina la escena criminal en Berlín y en cuya directiva estaba teniendo lugar un relevo. El núcleo del clan de los Remmo es una familia procedente de Líbano , aunque oriunda de Anatolia, que hoy reúne a unos 500 miembros con trasfondo turco, libanés o palestino y que constituye una subcultura endogámica y con leyes propias.
El robo de un banco
La Fiscalía de Berlín tiene abiertos cerca de 600 expedientes judiciales relacionados con este clan, muchos de ellos por delitos violentos. Ya le habían sido incautadas decenas de propiedades, por un valor de unos diez millones de euros y adquiridas gracias a los beneficios obtenidos en el robo de un banco en 2014 y en el atraco a un edificio de las aduanas alemanas en Emmerich. Solo en este último golpe se hicieron con 6,5 millones de euros . La policía siempre sospechó que realizaban los trabajos como una subcontrata, a modo de encargo, de acuerdo a las instrucciones e información que les eran proporcionadas. Y con ese mismo modus operandi comenzó a fijar sus objetivos, a partir de 2017, en los museos alemanes. En marzo de ese año, tres encapuchados asaltaron e l Museo Bode para llevarse una pieza de 53 centímetros de diámetro, 3 de grosor y 100 kilos de peso en oro de una pureza del 99,9%. La moneda era un regalo de Canadá a Alemania, pertenecía a una edición de sólo cinco unidades y solo su valor en oro, sin calcular el valor de colección, era de 3,75 millones de euros. En julio de 2017 la policía detuvo a cuatro personas, pero la moneda nunca se pudo recuperar. El responsable de Oficina de Investigación Criminal (LKA) de Berlín, Carsten Pfohl, señaló que «probablemente» había sido troceada, fundida y vendida.
En noviembre de 2019 fue asaltada la Bóveda Verde de Dresde , la colección de joyas reales más valiosa de Europa alojada en el Palacio Real de la capital sajona, donde el príncipe de Dresde y rey de Polonia Augusto II el Fuerte (1.670-1.733) reunió juegos de diamantes, rubíes y esmeraldas, obras de orfebrería desde el Renacimiento hasta el siglo XVIII de «inestimable valor», según la directora del museo, Marion Ackermann. El botín incluía piezas icónicas, como el Diamante Blanco de Dresde o la Orden Polaca del Águila Blanca. Ninguna de las piezas ha sido recuperada hasta ahora. Un año después fueron detenidos tres sospechosos, Wissam Remmo y otros dos miembros del clan, en una operación policial a gran escala con 1.638 agentes.
El siguiente objetivo fue el Museo de la Stasi de Berlín , dedicado a conservar y mostrar al público la historia de la policía política de la antigua República Democrática de Alemania (RDA) y del que se llevaron medallas militares y joyas, cuyo valor no era comparable al robo de Dresde, pero que terminó de fijar un patrón. También despareció un número indeterminado de carpetas de expedientes sobre víctimas de la Stasi. El modo de operar y la precisión en la elección del botín apuntaban nuevamente a un trabajo por encargo y posiblemente con información interna sobre horarios y sistemas de vigilancia. Eso explicaría la desaparición de las obras robadas, que tampoco aparecen en el mercado negro. Aunque hay pocas esperanzas de recuperar las piezas, crece el optimismo respecto a la posibilidad de desmantelar definitivamente el clan, apenas sea detenido Abdul Majed. «Ya falta poco» , avanza un portavoz policial, «sabemos que se refugia en Neuköln, precisamente su hermano fue detenido porque se atrevió a poner un pie en la calle para visitar a alguien, y una persona no puede quedarse encerrada indefinidamente. En cuanto de un paso en falso, le estaremos esperando».
«Detrás de ellos hay coleccionistas», dice un experto en el mercado de arte en Alemania, «las transacciones de arte son ahora muy limitadas y prácticamente no hay margen, mientras que los tipos de interés cero impulsan a invertir en bienes de valor duradero. Ahí es donde estas piezas históricas expanden todo su valor». Según esta teoría, las obras no han sido fundidas ni desmontadas, sino que se conservan como inversión a muy largo plazo en la cámara acorazada de coleccionistas particulares que se han servido del clan de los Remmo para hacerse con ese legado.