Ficha técnica
Neymar descerrajó a los nipones de un derechazo enorme, desde fuera del área, y destrozó a los mexicanos con una volea extraordinaria, esta vez con la zurda. El flamante fichaje del Barça no entra mucho en juego pero es rápido, desequilibrante, profundo y goleador. Aunque abusa de las faltas cuando defiende, por ponerle peros, mostró sus credenciales y volvió a resultar decisivo en el triunfo de un discreto Brasil que le dejó en puertas de semifinales. No maravilla la Auriverde pero da la sensación de que vence sin sufrir gran desgaste, con el mínimo esfuerzo.
Scolari, reacio a cambiar sus equipos tipo, insistió en la apuesta que ya le dio réditos ante los débiles asiáticos. Mismos jugadores e idéntico dibujo, con Neymar escorado a la izquierda. El astro de la Canarinha se encontraba a priori un bosque de piernas para poder penetrar en Fortaleza, ya que Chepo de la Torre cambió solo dos jugadores con respecto a Italia pero reforzó su sistema defensivo al adelantar al central Salcido al centro del campo y situar al lateral Flores de volante, por delante de Mier. Dos contra Neymar, pero no pudieron con él.
Ya en su primera opción, el astro del Barça participó en una jugada que terminó en gol de Óscar, el enganche del Chelsea, anulado por un fuera de juego previo. A la segunda no perdonó y firmó ese gol antológico que abrió pronto el camino del triunfo para los locales. La jugada no tenía aparente peligro pero resulta que el rechace de cabeza le llegó a un futbolista que le pega que la rompe con ambas piernas. Y como guinda, abrochó el triunfo local en el descuento, tras un movimiento en el que se zafó de dos defensores y un pase a Jo que era gol o gol.
Brasil tiene dinamita por Neymar, ya que Fred no es un ariete digno de una pentacampeona del mundo. El delantero despuntaba en el Lyón pero en el Fluminense se ha estancado. Al anfitrión le falta fútbol en el centro del campo, ya que Paulinho y y Luiz Gustavo no son organizadores de jerarquía, y continuidad. Se mueve a impulsos, a latigazos que coinciden con las apariciones de Neymar. Enfrente, a los mexicanos les faltó de todo. Rapidez, fútbol, empuje y fe. Se nota que es un grupo deprimido por su pésimo discurrir en las eliminatorias hacia el Mundial, donde le superan Estados Unidos y Costa Rica.
Se llegó al descanso con el central David Luiz sangrando por la nariz, tras un choque con su colega Thiago Silva, y pocas ocasiones reseñables: una internada de Neymar, que acabó con un tiro fuerte pero alto, y un centro-chut de Dani Alves que desvió Corona, no sin dificultades. En el área del veterano Julio César, nada reseñable a pesar de que Marcelo ofreció facilidades por su tendencia a la frivolidad en zona de máximo riesgo.
Brasil siguió cómodo en la segunda mitad. Controló sin asumir riesgos y sin gran posesión de balón, ya que en esa faceta el duelo fue equilibrado. Sufrió la anulación de otro gol, ahora por ‘offside’ de Thiago Silva y perdió una oportunidad pintiparada para sentenciar. Enorme pared entre Hulk y Neymar, pero control defectuoso del potente y delantero del Zenit que le impidió definir bien. En todo caso, mantuvo el exiguo triunfo sin sufrir sustos y lo incrementó tras un regate de Neymar para enmarcar.
