«No son máquinas», pero las tienen

«No son máquinas», dice Rubiales para defender a los árbitros . Pero ojo que los trencillas las tienen a su disposición y por lo que se ve no las saben controlar. He ahí el dilema que se presenta en un fútbol español presidido por un presidente que pide respeto para sus colegiados. La frase es muy bonita, empatiza y todo eso, pero no, señor presidente. Ya no cuela.

Ya se sabe que e l Cádiz está de uñas con el arbitraje este año. También lo estuvo el pasado, y eso que los chicos de Cervera se ganaron tanto en el campo que ni siquiera hubo que lamentar errores arbitrales a final de temporada pese a que el presidente la entidad, Manuel Vizcaíno, llamó al orden a Luis Rubiales con su primera carta para que «arreglase el VAR» después del encuentro celebrado en Anoeta donde se pitaron varios penaltis corregidos por la tecnología. Aquella tarde, llena de aciertos gracias al VAR, tan sólo fue la gota que colmó el vaso de la paciencia del cadismo, al que su presidente quiso ponerle voz después de que no se pitase el penalti claro a Perea de Foulkier en Carranza.

Aquello pasó pero se volvió a presentar este año y con distinto entrenador. El arbitraje pésimo en Mallorca le volvió a servir al presidente del Cádiz para volver a escribir en una carta abierta a Rubiales, al que instó otra vez a que «arreglase el VAR». La respuesta del presidente de la Federación fue de lo más dura y de las que más duelen. Las siguientes jornadas le mandó al Cádiz el halcón a su casa (Mateu Lahoz y Alberola Rojas) y la paloma en sus salidas.

Pues bien, esta semana Luis Rubiales ha vuelto a salir a la palestra . El máximo mandatario de la RFEF ha estado este martes en un encuentro informativo en Sevilla y allí trató varios temas de actualidad del fútbol español. Como no, entre ellos estuvo el de las polémicas arbitrales derivadas de las críticas por la falta de criterio en jugadas revisadas por el VAR. En ese sentido Luis Rubiales entiende que «el VAR ha mejorado mucho. Hace que los árbitros se equivoquen menos». Hizo también un llamamiento a las aficiones de respeto hacia el colectivo arbitral. «Tienen que entender que no son máquinas».

A su vez, incidió en que en que «el criterio del VAR es que entraría en acciones muy claras. Esa es la filosofía; es complicado contentar a todo el mundo y es entendible que haya críticas».

Por último, mencionó al que desde hace poco tiempo representa al máximo exponente del arbitraje español, el actual presidente de los arbitros Medina Cantalejo. «Apuesta por un fútbol de contacto. Tiene que lidiar con una temporada ya comenzada», dice.