Cádiz - Espanyol

Las dudas y certezas de Sergio González

El técnico catalán se frota las manos después de semanas de incertidumbre para elegir al mejor once posible

Única baja del Cádiz CF

Sergio González saluda a la afición L.V.

Pablo Vallejo

El Cádiz tendrá el domingo una nueva oportunidad para lograr la primera victoria de la temporada en casa, además de confirmar totalmente el cambio de dinámica del equipo en las últimas semanas. Una cita que tendrá como rival al Espanyol, club al que Sergio González guarda mucho cariño por su pasado y que se debe convertir en la víctima perfecta para los amarillos.

La realidad es que, horas antes del choque ante los pericos de Diego Martínez, las sensaciones alrededor del conjunto cadista son más positivas que las generadas en el club blanquiazul. Las dinámicas de ambos equipos se direccionan en caminos contrapuestos, pues el Cádiz otorga una inercia positiva mientras que el Espanyol no termina de convencer y la forma de empatar ante el Valencia la semana pasada, con el error garrafal de Álvaro Fernández, ha dejado aún más dudas en los pericos.

Por su parte, Sergio González ya goza de un estado mucho más saludable en la plantilla amarilla. Lejos quedan aquellas tardes donde el Cádiz sucumbía ante la superioridad aplastante del rival, donde ni el nivel cualitativo ni físico de los jugadores permitía hacer mucho más, o, al menos, de forma aparente.

Y es que el cuadro amarillo, en las primeras jornadas, contó en sus alineaciones con futbolistas como Santiago Arzamendia, Awer Mabil, Mamady Diarra, Tomás Alarcón o Antonio Blanco. Algunos de ellos, llamados a ser el elemento diferencial del equipo. Sin duda, un despropósito gestado desde la planificación deportiva de la directiva que ha pagado el equipo en el terreno de juego, desperdiciando así los primeros envites ligueros.

Si ha seguido al Cádiz en los últimos encuentros, se habrá dado cuenta de que ninguno de los nombres presentados han formado parte de los planes de Sergio González. El motivo es muy sencillo, y es que eran parches del técnico para paliar las evidentes carencias provocadas desde arriba.

Porque el cuadro gaditano apenas tuvo pretemporada para muchos jugadores. Piezas diferenciales en la pasada campaña, durante el tramo crucial para la permanencia, como Rubén Sobrino, Iván Alejo o Álex Fernández. Todos ellos han necesitado comerse jornadas ligueras para estar en disposición de ayudar al equipo. Qué decir de casos como el de Rubén Alcaraz, un futbolista especialmente capital para entender al Cádiz del presente y que no ha podido partir de inicio hasta la pasada jornada ante el Villarreal. Una noticia positiva, pero aún más al saber que al bueno del catalán aún le falta un poco para estar al máximo, lo que quiere decir que puede estar mejor aún.

Porque con la puesta a punto de Alcaraz y Fede no han vuelto ni Tomás ni Blanco. Con la de Alejo y Sobrino han desaparecido Mabil y Diarra. También Arzamendia, que aún no ha justificado ni un solo euro de los abonados a Cerro Porteño por sus servicios. Así es el Cádiz, un club vendedor que no vende y que paga más caro de lo que vale un producto.

Además, otras piezas que el curso pasado asumieron de forma espléndida el papel de revulsivos o secundarios, estaban siendo obligados a llevar la voz cantante. Es el caso de José Mari, que demostró ante el Villarreal que no hay nadie como el para ofrecer compostura y equilibrio en el centro del campo amarillo.

La realidad es que, ocho jornadas después, Sergio González al fin cuenta con una serie de efectivos que le facilitan su tarea de salvar al equipo. La victoria en Pucela ante el Valladolid fue el punto de inflexión necesario, y las sensaciones ante el Villarreal fueron la prolongación y la miniconfirmación de que esa inercia positiva continúa hacia adelante.

La conquista de los tres puntos en el José Zorrilla vino acompañada de la recuperación de efectivos anteriormente mencionados, perfectamente acompasado con el resultado del equipo y confeccionando una coreografía idónea para dar la vuelta a la tortilla y volver a ser ese Cádiz temible de la segunda vuelta del curso pasado.

Tal y como se vio ante el Valladolid y ante el Villarreal, ahora Sergio sí tiene la opción de colocar a un equipo competitivo desde el inicio y, a raíz de ahí, poder jugar con los tiempos del partido e ir interviniendo según lo necesario. Pasó en Pucela y se ganó y pasó ante el Villarreal y casi se gana. Intervencionismo y eficacia.

Todo esto aumenta el abanico de posibilidades de Sergio , que podría estar ante la confección del once más difícil de la temporada. Solo hay dos cosas que el cadista tiene totalmente claro. Quizás tres. Las titularidades de Ledesma, Zaldua y Fede. Uno es el mejor del inicio, otro es muy fiable y no le queda otra tras la expulsión de Iza y el último es fundamental para aportar brega e inteligencia táctica en el medio.

Los demás son toda una incógnita. Parece claro que 'Pacha' Espino será el lateral izquierdo y que será Rubén Alcaraz quien acompañe al cántabro en la medular. Hasta aquí las certezas. Ahora empiezan las dudas.

Porque desconocemos el nivel físico de Brian Ocampo y Theo Bongonda. Los dos últimos fichajes del mercado veraniego, aquellas piezas llamadas a ser diferenciales, aún no han terminado de aclimatarse y ha sido el propio Sergio el primero en quejarse de esta situación. El congoleño fue titular ante el Villarreal contra todo pronóstico y demostró que no está para este Cádiz.

En la parcela ofensiva es donde más dudas existen. Álvaro Negredo dio el gol ganador en Valladolid y demostró ante el Villarreal que no todos los contextos son positivos para su juego. 'Choco' Lozano, que era de los jugadores en mejor forma durante la pretemporada, tampoco ha logrado aportar en el inicio aunque fue muy importante su salida ante los groguets. También está el caso Lucas Pérez, que, progresivamente, se incorpora a la disciplina amarilla emocional y futbolísticamente.

Con todo esto, Sergio González estaría ante la decisión más difícil de la temporada. A él le debe gustar tener tantas opciones, pero no estaba acostumbrado durante este curso. Ahora, la piedra está en su tejado. Todo y más para vencer al Espanyol.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios