Un Consejo Consultivo Civil dirigirá la crisis en Egipto
Miles de personas continúan concentrados en la plaza Tahrir para presionar a la Junta Militar
EL CAIRO Actualizado: GuardarLa Junta Militar egipcia, dirigentes políticos y candidatos presidenciales como Amro Musa pactaron formar un Consejo Consultivo Civil que se coordinará con los dirigentes castrenses para solucionar la crisis que vive Egipto. La agencia estatal egipcia Mena ha informado de que los participantes en esa reunión acordaron que esta instancia consultiva funcione durante el periodo electoral, que se extiende hasta marzo, e incluya a representantes de las fuerzas políticas, personalidades militares y expertos.
De acuerdo con la misma fuente, este nuevo Consejo actuará en coordinación con los dirigentes castrenses y el Consejo de Ministros para "presentar soluciones a los problemas políticos, económicos y sociales en el país hasta el establecimiento del Consejo de Shura (Cámara alta), que asumirá esta responsabilidad". La reunión, presidida por el jefe de la Junta Militar, mariscal Husein Tantaui, se ha celebrado en medio una renovada oleada de protestas populares en las que desde hace días se exige a los oficiales, que controlan el país, que traspasen el poder a una autoridad civil. Al encuentro acudieron representantes de seis partidos políticos, entre ellos los dirigentes del liberal Al Wafd, de Libertad y Justicia, cercano a los Hermanos Musulmanes, y del salafista Al Nur, además de distintas personalidades independientes y candidatos presidenciales.
Tras la reunión, Musa, ex ministro egipcio de Asuntos Exteriores y ex secretario general de la Liga Árabe, ha indicado que se celebrarán reuniones para determinar las competencias de este Consejo después de la primera vuelta de las elecciones legislativas. Además, señaló que estará formado por al menos 500 miembros, pero no detalló que nombres se barajan para ocupar estos puestos, en declaraciones a la edición digital del diario Al Ahram.
El pulso se prolonga
Tahrir ha prolongado el pulso que mantiene durante los últimos días. A un día de que las elecciones presidenciales den comienzo, miles de personas siguen acampados bajo un mismo objetivo: presionar a la Junta Militar que gobierna en funciones desde la caída del expresidente Hosni Mubarak para que abandone el poder. La sensación que flota en el aire es que los comicios presidenciales que arrancan mañana no estáran libres de la influencia del Ejército. Algo que rechazan frontalmente los manifestantes que durante toda la noche se han arremolinado ante el campamento que preside el corazón de la céntrica plaza cairota y que hoy han regresado para participar en la 'Manifestación de la Legitimidad Revolucionaria', una gran marcha convocada por 24 partidos y organizaciones revolucionarias, sin los principales grupos islamistas.
En respuesta a las protestas, el jefe del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas de Egipto, el general del aire Husein Tantaui, ha advertido de que el país sufrirá "graves consecuencias" si no se supera la actual crisis iniciada por la vuelta de la población a las calles para presionar a la junta militar. Sin embrago, Tantaui ha asegurado que el poder militar mantendrá "el mismo lugar" en la nueva Constitución "y en todas las constituciones". Precisamente, las prerrogativas que se quiere reservar el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas fueron el desencadenante de la protesta en Tahrir el pasado día 18, que derivó en enfrentamientos entre la policía y manifestantes que se extendieron durante toda la semana pasada y en manifestaciones en varios puntos del país.
Los manifestantes se oponían a un documento propuesto por el ahora viceprimer ministro en funciones, Ali al Selmi, que reservaría una serie de prerrogativas a la Junta Militar cuando se elabore la futura Constitución como el control del presupuesto de las Fuerzas Armadas y la potestad para declarar la guerra, entre otras. Al menos 42 personas han muerto en Egipto esta semana con la reanudación de las manifestaciones, que culminaron el pasado viernes con una multitudinaria concentración en la plaza de Tahrir (El Cairo), epicentro de las revoluciones en el mundo árabe.
Cita con las urnas
Tantawi ha instado a la población a que deposite su voto en las elecciones parlamentarias, cuya primera fase comenzará mañana y se extenderá hasta el martes. Las segundas vueltas, en las que se decidirá quiénes ocuparán los escaños para los que ningún candidato haya conseguido una mayoría clara, también durarán dos días. "Egipto se encuentra en una encrucijada", ha indicado Tantawi en declaraciones a la televisión estatal. "O triunfamos y nos encaminamos a una suave transición económica, política y social, o nos enfrentaremos a graves consecuencias y eso no vamos a permitirlo", ha advertido.
En última instancia, Tantawi ha instado a los políticos de la oposición como Mohamed El Baradei o Amr Musa que acepten la reciente designación del primer ministro en funciones Kamal Ganzouri, encargado de gestionar el nuevo Gobierno desde la dimisión esta semana de su predecesor Essam Sharaf y del anterior gabinete en pleno en señal de repulsa por la respuesta militar ante las últimas protestas. En este sentido, a lo largo de las próximas horas se verá si la propuesta de El Baradei surge efecto. El que fuera premio Nobel de la Paz y candidato presidencial anunció anoche su disposición a renunciar a la carrera por la presidencia si se le solicita encabezar un nuevo Gobierno de unidad nacional, según revelaron fuentes de su campaña. Esta opción, la de un gran Ejecutivo de consenso, es la preferida por los que desde hace días protestan en las calles.
"Si se le pide oficialmente que forme un Gobierno de salvación nacional, renunciaría a su candidatura a la Presidencia para poder ejercer con completa neutralidad durante el periodo provisional", ha señalado la campaña de El Baradei en un comunicado. Mientras, los movimientos revolucionarios movilizados en contra del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que tutela la transición del régimen de Hosni Mubarak a una democracia, han rechazado la propuesta de los militares de que el ex primer ministro de Mubarak Kamel el Ganzuri forme un Gobierno provisional y han propuesto en cambio la formación de un consejo que sustituiría a la propia junta militar cuyo núcleo estaría formado por cinco miembros concretos.
Candidatos al nuevo gobierno
Precisamente, entre ellos estarían, según la propuesta de los grupos revolucionarios, el propio El Baradei, quien dirigiría el nuevo gobierno, acompañado por el periodista económico Ahmed el Naggar, el líder del partido nasserista Karama, Hamdeen Sabahi, el juez Ashraf Baroudy y Abdel-Moneim Aboul-Futtouh. En el comunicado, su equipo de campaña revela que El Baradei se ha reunido con los movimientos juveniles y los partidos políticos que rechazan de plano la designación de El Ganzuri como líder del gobierno de transición. "Las fuerzas políticas y los grupos insisten en que la única vía de salida de la crisis es formar un Gobierno de coalición nacional con plenos poderes para manejar el periodo de transición hasta que se celebren las elecciones presidenciales", sostiene.
En este contexto, los activistas han reclamado a los ciudadanos que acudan a la protesta de la plaza de Tahrir este domingo, un día antes del comienzo de los comicios parlamentarios. Los manifestantes congregados en Tahrir han gritado proclamas contra los generales hasta bien entrada la noche, mientras que otros se han estado acomodando entre el hervidero de tiendas de campaña y pancartas colocadas en el epicentro de las protestas desde el pasado mes de enero.