El corresponsal de ABC, Luis de Vega./ ABC
tensión en el aaiún

Marruecos retira la acreditación al corresponsal de ABC

MADRID Actualizado: Guardar
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Continúa el asedio a los periodistas españoles que intentan informar desde el Sáhara Occidental. Esta mañana el Ministerio de Comunicación marroquí ha retirado la acreditación al corresponsal de ABC, Luis de Vega, alegando "prácticas de animosidad y falsificación de los hechos" en la cobertura de los "actos de violencia y vandalismo" en El Aaiún, según informa la Agencia Magreb Arabe Press, que cita un comunicado del Ministerio. Pero no ha sido el único al que se le ha impedido ejercer su trabajo, esta tarde tres periodistas de la cadena Ser han sido expulsados de Marruecos y a otros nueve informadores de diferentes medios de comunicación españoles se les ha impedido la entrada en el país.

Luis de Vega, profesional de reconocido prestigio, trabaja como corresponsal en Marruecos para ABC desde hace más de ocho años, utilizando el Reino alauí como base para cubrir toda la zona del Magreb y el África subsahariana. Su profesionalidad, tanto como fotógrafo como redactor, ha merecido numerosos premios y reconocimientos de la prensa internacional e instituciones, y ha sido finalista del Premio Cirilo Rodríguez, que otorgan los profesionales de la información al periodista español más destacado en el extranjero. La nota ministerial señala: "Denunciando de forma enérgica el comportamiento de algunos corresponsales de medios españoles acreditados en el territorio nacional, el Ministerio precisa que, entre los incumplimientos a las reglas de la profesión registrados al respecto, figura la actitud desprovista de toda profesionalidad, que no cesa de adoptar el corresponsal del diario ABC acreditado en Marruecos, lo que exige la aplicación del artículo 22 de la Ley que establece el estatuto de los periodistas profesionales".

Esta sería la primera vez que las autoridades marroquíes retiran la acreditación a un corresponsal español. En el pasado sí lo han hecho con medios franceses como el diario Le Monde (el único al que ahora han permitido entrar a El Aaiún) o la agencia France Presse. La ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, ha expresado su "profunda preocupación" por los "hechos muy graves" ocurridos en el Sáhara Occidental y ha pedido al Gobierno marroquí que restituya su acreditación al corresponsal de ABC Luis de Vega y facilite el trabajo de la prensa española en la zona.

Pánico entre los saharauis

Entre el grupo de periodistas que pretendían informar sobre la situación tras el desmantelamiento del campamento Gdeim Izik se encuentran dos de TVE, uno de Onda Cero, dos de Antena 3, una de France Press, uno de Público y dos de Efe, así como los redactores de la Cadena Ser Àngels Barceló y Nicolás Castellano y el técnico Ángel Cabrera, que han sido expulsados después de entrar en El Aaiún rompiendo el bloqueo informativo impuesto por Rabat.

A su llegada al aeropuerto de Gran Canaria, Àngels Barceló ha dicho que que Marruecos no respeta la libertad de información y que, ante esta situación, el Gobierno de España no ha utilizado suficiente contundencia. "El Gobierno de Marruecos no respeta uno de los pilares del estado de derecho, que es el derecho a la información y el Gobierno español no utiliza la contundencia que debería utilizar", ha manifestado Barceló, quien ha asegurado que mientras estuvieron allí no han estado desasistidos por las autoridades españolas. Ha afirmado igualmente que durante el tiempo que han estado en El Aaiún han observado mucho miedo entre la población y ha insistido sobre la necesidad de que los medios de información puedan estar presentes para dar cuenta de la situación actual.

Barceló ha asegurado que la población saharaui tiene "muchísimo miedo" y "temor, pánico a hablar. La periodista ha añadido que no se quiere "ni imaginar lo que pueden pasar los saharauis" si ella y sus dos compañeros, "teniendo el apoyo del Gobierno de España", han vivido "una noche de maltrato, una noche de detención, una noche de vejaciones". Actualmente El Aaiún es "una ciudad tomada" y hay que intentar entrar "una y otra vez" para contar lo que en ocurre y, en caso de no lograrlo, denunciar la imposibilidad de informar.

De vuelta sin poder desembarcar

Nueve de los periodistas que han llegado hoy a Gran Canaria habían viajado hoy mismo a El Aaiún en el primer vuelo de la compañía Binter que salía hacia allí después de que el lunes decidieran suspender sus vuelos ante la incertidumbre de lo que pudiera estar ocurriendo en la zona. Esos nueve periodistas no pudieron desembarcar del avión debido a la prohibición de las autoridades marroquíes y volvieron en la misma aeronave junto a los tres periodistas de la Ser que permanecían en El Aaiún desde hace varios días y que fueron expulsados hoy.

El comandante de la aeronave había indicado a los periodistas antes del despegue de Gran Canaria que, una vez estacionados en el aeropuerto de El Aaiún, subirían a bordo agentes de seguridad marroquíes para recoger los pasaportes de los enviados especiales. Policías de paisano identificaron a los periodistas y a los medios para los que trabajan y, tras quince minutos de espera, fue el propio comandante quien comunicó la negativa a que la prensa internacional pudiera desembarcar.