CRISIS POR EL CORONAVIRUS

Oleada de despidos de eventuales tras el cese de actividad en Navantia

La industria auxiliar de la Bahía cancela miles de los contratos temporales firmados para la reforma de cruceros y los encargos offshore que estaban en curso

La suspensión hasta nueva orden del trabajo en astilleros obliga a las subcontratas a plantear también una cascada de ERTE para su personal fijo

Trabajadores de subcontratas trabajan en la obra de un crucero en Cádiz ANTONIO VÁZQUEZ

Javier Rodríguez

El cierre de los diques en los astilleros gaditanos ha tenido un efecto dominó en la industria auxiliar naval de la Bahía . Las consecuencias más inmediatas de la paralización de la actividad en Navantia la han pagado las subcontratas y, en primer lugar, la mano de obra eventual que había sido contratada para afrontar la reforma de cruceros que se venía encima en Cádiz y Puerto Real con la obra del 'Allure' y del 'Carnival Victory'. Además, las empresas auxiliares también tenían un importante contingente de temporales en los tres proyectos eólicos que se desarrollan en el astillero puertorrealeño y que han quedado también paralizados.

El mismo escenario se ha dibujado para las subcontratas que desde enero de 2019 trabajan en la construcción de las cinco corbetas saudíes en la planta de San Fernando . Este periódico ha podido confirmar que la decisión de Navantia de cerrar los diques hasta nueva orden originó este lune s más de un millar de cancelaciones de contratos laborales por obras y servicios en las principales empresas del sector . Los eventuales han abandonado el tajo con una rescisión de su contrato bajo el brazo . Firmas como Coasa, Moncobra y ACG Centro Bahía, amén de Pine Instalaciones y Montajes SA y Nervión Industries, entre otras, son los principales proveedores de los astilleros públicos de Cádiz y, ahora, las principales afectadas por el cierre temporal de los diques por el coronavirus.

La situación impide a las empresas mantener activa una plantilla temporal que no tiene trabajo y cuyo contrato por obras y servicios para el que había sido contratada ha quedado suspendido por Navantia. La segunda parte a la que se enfrentan estas empresas auxiliares afecta al futuro de su plantilla fija . Todo apunta a que las medidas especiales que dictará el Gobierno en materia laboral serán la hoja de ruta que adopten las empresas esta misma semana para ajustar sus plantillas a las nuevas necesidades que ha impuesto el Estado de Alarma en el que nos encontramos por la pandemia, lo que significa la puesta en marcha de Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE) para los fijos hasta que se normalice la situación.

Varapalo para la hostelería

El escenario que se vislumbra para el sector naval con la suspensión temporal de la actividad en Navantia es muy similar al que se presenta para el sector de la hostelería, que ha visto como la plantilla eventual que suele formar parte del inicio de la temporada alta con la Semana Santa ha quedado desactivada y sin posibilidad de contratación a corto o medio plazo . El sector de la hostelería es uno de los motores de la economía de la provincia de Cádiz, con más de 27.000 empleados y unas 7.000 empresas , entre hoteles, hostales, campings, bares o restaurantes, según datos sindicales.

Por lo que respecta la metal, otro pilar de la economía provincial con 22.000 empleados y 3.500 empresas , afronta uno de los momentos más duros. Este sector del metal firmó en noviembre de 2017 su convenio colectivo en Cádiz garantizando con ello cuatro años de paz social.

Reprogramación de obras

Los astilleros públicos paralizaron su actividad presencial este mismo lunes. Solo están autorizados a trabajar técnicos y comerciales bajo la fórmula del teletrabajo. En este sentido, LA VOZ ha podido saber que  la dirección de Navantia está reprogramando todas las obras que han quedado suspendidas con la orden de cese de actividad. En el caso del astillero de Cádiz se ha aplazado la reparación del crucero ‘Allure’, de la Royal Caribbean, y todo apunta a que también se posponga la del ‘Constellation’, que estaba prevista para abril. De lo que se trata ahora es de e ncajar en el calendario lo que estaba previsto ejecutar a lo largo de la primavera y acoplarlo para los meses de verano . Así, los técnicos buscan nuevo hueco para el ‘Allure’, el ‘Carnival Victory’, el ‘Constellation’ y el ‘Juan Carlos I’, cuya varada estaba prevista para el próximo mayo y necesitaba más de un mes en el dique para la mejora de su sistema de propulsión.

El coronavirus también ha obligado a modificar el calendario de entregas de los tres contratos eólicos en los que trabaja el astillero de Puerto Real. La dirección de Navantia negocia nuevos plazos para entregar la subestación eléctrica que construye para la empresa noruega Equinor Energy y que servirá para dar cobertura al complejo petrolífero de Johan Severdrup, en el Mar del Norte. También se ha modificado la entrega de una de las 20 ‘upper’ jackets para el parque eólico Moray Firth Offshore East, que se construye en Puerto real y hay cambios también para la construcción de una jackets flotante para el campo ingles de Kinkardine. Los dos últimos encargos se iban a entregar a lo largo de la primavera.

La medida adoptada por Navantia de paralización de la actividad afecta de lleno también a la obra de las cinco corbetas saudíes que se desarrolla en el astillero de San Fernando. De hecho, Navantia había fijado para el 8 de abril la botadura de la primera unidad, sin embargo, el cese de actividad retrasa el acto.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios