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Los gaditanos soportan los precios más altos de alimentación de toda la Comunidad
Un informe del Ministerio de Industria señala que la fruta y la verdura es un 16% más cara en los supermercados que en las pequeñas tiendas Droguería y envasados son, en cambio, más baratos en los hipermercados
Actualizado: GuardarLos gaditanos lo tienen difícil para poner a la mesa un plato que a la vez que bueno y bonito, sea también barato. Conjugar la calidad y el precio en la cesta de la alimentación es una tarea más complicada en Cádiz que en el resto de la Comunidad Autónoma, según un estudio del Ministerio de Industria, Comercio e Industria, en el que se detecta que el coste de las frutas y verduras, los pescados y las carnes en los establecimientos de la capital gaditana es el más elevado de Andalucía.
El análisis ha sido realizado por la Universidad Complutense de Madrid con más de 2.000 establecimientos del país y sobre una base de 60.000 precios recabados durante el pasado mes de mayo. Según esta comparativa, las frutas y verduras de Cádiz son un 16% más caras que Jaén, la ciudad que ofrece los productos del campo más económicos de España. Otras capitales andaluzas como Sevilla y Málaga, con costes de vida tradicionalmente mayores, se quedan por debajo de la gaditana en este ranking de la alimentación «verde».
En los pescados, resulta paradójico que dos capitales costeras son las que soportan los precios más elevados: Cádiz y Málaga, donde son un 19% mayores que en Córdoba, el municipio donde se disfruta de la cesta del mar más competitiva no sólo de la Comunidad sino de todo el país.
El tercer apartado fundamental en toda compra diaria doméstica es la carne y en éste tampoco los gaditanos tienen un respiro en el momento de llenar el carro. Los productos cárnicos también están entre los más caros de Andalucía, sólo superados ligeramente por Málaga, y en este caso, la ciudad que ofrece el mejor yantar de esta alimentación es León, uno de los epicentros de esta industria y que presume de una de las mayores calidades nacionales.
Otras dos áreas analizadas por la Complutense son la droguería y la comida envasada, éste último considerado como uno de los formatos de venta con mayor crecimiento de los últimos años y con buenas perspectivas de posicionamiento en las estanterías de alimentación de grandes y pequeños establecimientos.
En ambas gamas de productos, la capital gaditana registra una tendencia contraria y los precios son más moderados que en el resto de la región. En el caso de los artículos de droguería, los comercios de Cádiz son los más económicos junto a los cordobeses, mientras que los jienenses son los más «careros» de Andalucía.
Finalmente, en alimentación envasada, la horquilla es mucho menor y se reduce a una diferencia de sólo el 1% ó el 2% en función de la localidad de compra. Cádiz está en un punto medio y sólo es un 3% más costosa que la mínima del país, que está en Pontevedra.
Fórmula de ahorro
El estudio también hace una comparativa entre los precios según el tipo de establecimiento y concluye que la mejor fórmula de ahorro en la cesta de la alimentación es comprar la fruta y verdura en los comercios especializados porque cuestan un 16% menos que en los grandes supermercados y un 14% respecto a los mercados municipales que son, precisamente, los puntos más tradicionales de compra de este tipo de productos. En cambio, en estos mercados y en los comercios especializados sí hay que hacerle un hueco a la carne porque resulta más barata (entre un 1% y un 6%) que en el resto de establecimientos.
En pescado y droguería, las mejores oportunidades están en los hipermercados y llegan a alcanzar una diferencia de hasta un 13% en el caso de los productos frescos del mar. Estas grandes superficies del comercio también han apostado por los productos envasados dirigidos al consumo más joven y rápido y ofrecen en esta gama los mejores precios.
Esta comparación lleva al catedrático de Economía Aplicada de la Complutense Francisco Javier Casares, uno de los dos autores del estudio, a concluir que las grandes superficies y las tiendas de barrio son los formatos comerciales más ventajosos para adquirir alimentación fresca (verdura y pescado), el tipo de productos donde se registra la mayor dispersión de precios de toda la cesta de la compra de los hogares españoles.
Además, otro de los factores detectados es el denominado «elasticidad cruzada», que alude a las fuertes diferencias de precios que se han detectado en cada tipo de comercio, de forma que puede ofrecer importes sobresalientes en una clase de productos y dispararse en otros.