Rescatan un pesquero a la deriva con 226 inmigrantes a bordo
El contingente, procedente de la India y Pakistán, partió del Golfo de Guinea y fue auxiliado a unas nueve millas al oeste de Chipiona
Actualizado: GuardarEl mayor contingente de inmigrantes irregulares a bordo de un barco y que haya recalado en costas gaditanas, fue rescatado en la mañana de ayer en aguas españolas, a nueve millas al oeste de Chipiona. El recuerdo del barco negrero Menavaal 1, que llegó el año pasado a Algeciras con cerca de 200 extranjeros apiñados en sus bodegas, fue constante cuando un pesquero repleto de hombres asustados atracaba por la tarde en Cádiz.
El arrastrero donde viajaban 220 sin papeles, junto a los seis miembros de la tripulación, enarbolaba la bandera de cortesía española y mostraba un nombre: Annat TG99. A priori, todo indicaba que esa denominación era falsa, ya que las condiciones del barco, viejo y destartalado, contradecían la supuesta fecha de botadura en 1999 como indicaría su propio nombre. Horas después, un portavoz de la Subdelegación del Gobierno confirmaba que el Annat TG99 no existe y que la falsa denominación podría ser una prueba de su actividad ilícita.
Un importante dispositivo asistencial (Cruz Roja y Protección Civil) y policial (Cuerpo Nacional de Policía y Guardia Civil) recibía a las ocho y media de la tarde el barco negrero en el muelle Marqués de Comillas. El pesquero llegaba remolcado por la embarcación de Salvamento Marítimo Salvamar Gadir y entraba en la dársena gaditana escoltada por otra patrullera de la sociedad estatal. Atrás quedaban horas de navegación en precarias condiciones y un rescate en alta mar.
De la existencia de este barco se tuvo conocimiento hacia las doce del mediodía. El pesquero María Luisa Cárdenas avistaba la embarcación, de 30 metros de eslora, que estaba a la deriva. Los tripulantes del barco español lograron ver decenas de personas en la cubierta del Annat TG99 y pidieron ayuda. Salvamento Marítimo envió su helicóptero Helimer, con base en Jerez, que fue el primero en llegar a las coordinadas indicadas por el María Luisa Cárdenas. Los pilotos pudieron comprobar que las informaciones remitidas por el pesquero español eran ciertas y se activó el dispositivo de rescate.
Dos patrulleras de la Guardia Civil de Cádiz y Huelva, la embarcación Salvamar Gadir y el remolcador Sertosa 18 fueron enviados a la zona de avistamiento para que se encargaran de las labores de remolque y escolta del Annat. Al situarse junto al pesquero accidentado, dos agentes del Instituto Armado junto a otros dos miembros de Salvamento Marítimo subieron a bordo para confirmar el estado de las personas que viajaba hacinadas en la cubierta. Los guardias abrieron las compuertas que dan acceso al sollado de marinería (camarote) y observaron que había decenas de inmigrantes en el interior. Un primer recuento muy somero arrojaba la cifra de dos centenares de sin papeles. Ante esta situación, cuatro agentes de la Benemérita se quedaron en el barco para vigilar al pasaje tras corroborar que no había ninguna persona que necesitara de un traslado urgente, vía helicóptero, a un hospital.
El siguiente paso en el rescate fue la verificación del motivo de la avería que mantenía sin gobierno el barco. Al parecer, las malas condiciones del mar pudo provocar la rotura de una de las herramientas que equipan a los arrastreros; unas compuertas traseras que sirven para desplegar las redes. Una de estas piezas pudo caer al agua. La Guardia Civil tuvo que cortar una estacha, probablemente metálica, que impedía el avance del Annat, y de la que pendían a modo de ancla dos de las cuatro compuertas. Estas labores se prolongaron a lo largo de una hora y cuando la nave quedó libre, se inició el traslado a puerto ayudado de una de las embarcaciones de Salvamento Marítimo.
Fuerte viento
En principio se optó por arribar a la costa de Huelva, pero por motivos de seguridad, según explicó la Subdelegación del Gobierno, se eligió el atraque en Cádiz. Cinco horas y media de navegación, a cuatro nudos, fueron precisas para cubrir el trayecto hasta el muelle Marqués de Comillas de la capital. Esta lentitud estuvo motivada por el temporal de fuerza 5 -a las seis de la tarde subió un nivel de intensidad-, con rachas de viento de levante de hasta 40 kilómetros a la hora, que azotaba en el litoral más occidental de Andalucía.
En el puerto gaditano, horas antes de arribar el Annat, ya estaba instalando el dispositivo de emergencia para atender a los inmigrantes. Protección Civil desplegó una carpa en el interior de la Estación Marítima donde fueron recibidos y evaluados los extranjeros. Cruz Roja se encargó de la asistencia sanitaria y de entregar a los sin papeles alimentos (fruta y leche), mantas y ropa seca. Además, había prevista la instalación de dos hospitales de campaña, que no llegaron a montarse por el fuerte viento; también trasladaron cinco ambulancias y varios vehículos. La seguridad y vigilancia del perímetro creado en el muelle gaditano fue reservada a la Guardia Civil y la Policía Nacional, que colaboraron en el traslado de los inmigrantes sanos al centro de estancia de Era de las Torres, en Algeciras.
Seis de los 226 extranjeros resultaron ser los componentes de la tripulación. Eran las únicas personas de raza negra que viajaban en el barco y declararon ser de Gambia. El resto evidenciaba una procedencia hindú. Aunque muchos de ellos se negaron a contestar a las preguntas de los agentes, y ni tan siquiera reconocían si sabían hablar inglés, hubo otros que aseguraron ser hindús, que procedían de Pakistán o de Cachemira.
Seis detenidos
La tripulación fue sometida a un reconocimiento médico y tras confirmarse su buen estado físico fueron detenidos como presuntos autores de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros (tráfico de personas). La noche la pasaron en los calabozos de la Comisaría de Cádiz y es presumible que entre hoy y mañana se presenten ante el titular del juzgado de Instrucción nº4 de Cádiz, que se ha hecho cargo de las diligencias al estar ayer de guardia.
Sólo dos hospitalizados
El director de emergencias de Cruz Roja, Fernando Vera, confirmó que la mayoría de los inmigrantes se encontraba en buen estado. Algunos presentaban cuadros febriles y a diferencia de otros contingentes similares no demostraban signos de agotamiento o hipotermia. Uno de los inmigrantes -todos ellos varones- fue tratado con pomada ante la sospecha de que padeciera sarna; tres fueron llevados al Puerta del Mar y dos quedaron ingresados. Además, tres inmigrantes fueron sometidos a unas pruebas médicas para determinar su edad ante la sospecha de que sean menores. El juez solicitó que cinco de los miembros del pasaje se quedaran en Cádiz para que ejerzan de testigos; mientras que el resto fue llevado a Algeciras.
Sobre la ruta que seguía el Annat, algunos de los sin papeles reconocieron que habían salido del Golfo de Guinea, pero está por determinar su destino final. El hallazgo en el puente del pesquero de una bandera italiana y otra griega hace sospechar que iban a navegar por estas aguas. Los primeros indicios apuntan a que estos inmigrantes podrían recalar en Italia, Grecia incluso Turquía. Ahora bien, no se sabe si iban a ser trasbordados desde el Annat a otros barcos o si tomarían tierra desde el viejo pesquero.