CULPABLES. Cuevas y Raposo durante el juicio. / ANTONIO VÁZQUEZ
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El juez ratifica el fallo del jurado del 'caso Sanlúcar' y condena por intento de soborno a los ex alcaldes

Ambos ex regidores socialistas, de Sanlúcar y Chipiona, recurrirán ante el Supremo para evitar los dos años de cárcel

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Conforme al veredicto de «culpabilidad» por el delito de cohecho que dictó el pasado 5 de mayo el jurado popular en relación al caso Sanlúcar, el tribunal de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Cádiz ha condenado a dos años de cárcel -un año y seis meses por el delito de cohecho y seis meses por el delito de tráfico de influencias- al ex alcalde socialista de la localidad, Agustín Cuevas Batista, por intentar comprar el voto del concejal del PP Manuel Ramírez, Cunete, en 1999, con 50 millones de pesetas y así hacer fracasar una moción de censura que había en su contra, que le hubiese hecho perder el bastón.

La sentencia también condena por esos mismos delitos al ex secretario de la Organización del PSOE en Sanlúcar, Rafael García Raposo, a un año y ocho meses de prisión.

El ex regidor de Chipiona, acusado de haber colaborado en el delito de cohecho al ofrecer un contrato de trabajo en el Ayuntamiento a Cunete, se enfrenta a un años y seis meses de prisión.

La Audiencia impone penas de un año de prisión para los tres empresarios que facilitaron el dinero.

En relación a la sentencia dictada por el tribunal, el ex edil de Chipiona, Luis Mario Aparcero, manifestó que «habrá que asumir la sentencia, recurriremos, iremos a donde haya que ir y espero que en los próximos altos tribunales de Justicia de este país se demuestre mi inocencia, como así pienso hacer».

Asimismo, Aparcero dijo tener «la satisfacción personal y la conciencia tranquila de ser inocente. No me siento culpable de esta trama, prueba de ello es que en el juicio hubo cosas que no se investigaron, como el cambio de declaración del guarda del cámping que en un principio dijo que la reunión no existió».

Finalmente, el ex regidor de Chipiona señaló con cierta indignación que «según el fiscal lo único que he hecho es firmar un contrato de trabajo en blanco, de manera que no tengo nada que ver con la trama económica no he tenido conocimiento de esta historia que estaban organizando en Sanlúcar».

Por su parte, el mismo día de conocer el veredicto de «culpabilidad» del jurado, el ex regidor de Sanlúcar, Agustín Cuevas, ya manifestó su intención de llegar a instancia mayores. «Vamos a recurrir, confiamos en la Justicia y creemos que al final va a prevalecer la verdad. Creemos que este es un primer paso del caso Sanlúcar, tenemos que ir todavía al Tribunal Supremo de Justicia de Andalucía y veremos qué pasa».

La parte política

El secretario provincial del PSOE, Francisco González Cabaña, acogió con «satisfacción» la sentencia, por cuanto delimita en el «campo de las responsabilidades» quiénes fueron los que estuvieron involucrados en esta operación, muy en contra de las tesis defendidas por el PP de que en este caso había implicaciones de altas esferas del partido.

El dirigente socialista apuntó, además, que la resolución judicial viene a confirmar el acierto de la expulsión de las filas socialistas de Cuevas y Raposo y con posterioridad, de Aparcero, que como aclaró, se hizo en «tiempo y forma». Asimismo, confió en que este caso sirva de ejemplo para que «no se vuelva a repetir».

El análisis del presidente provincial del PP, Antonio Sanz, fue contrapuesto al de su homólogo socialista, ya que entendió que la sentencia confirma que «hay un PSOE corrupto en la provincia y no lo dice el PP, lo dicen los tribunales».

No obstante, ambos dirigentes sí coincidieron en el carácter «ejemplar» de la condena, aunque el popular añadió que «demuestra el triunfo de la democracia, que ha dado la razón al PP». Sanz atribuyó a la sentencia su carácter «pionero» a nivel nacional por dejar en evidencia un intento de soborno de este tipo, y consideró que es «sorprendente» que el PSOE no haya pedido disculpas.