Llegó el momento de plantear un nuevo modelo de cabalgata para Cádiz

Almudena del Campo

08/01/2022
Actualizado 09/01/2022 a las 08:55h.

El que se ha convertido en el oso polar más famoso de toda España y que sin duda vivió su momento más amargo en la Cabalgata de los Reyes Magos de Cádiz (como consecuencia de un fallo técnico que podría haber sucedido en cualquier otra ciudad del país), puede ser el punto de inflexión para que el Ayuntamiento de Cádiz se plantee de verdad un nuevo modelo para la Navidad gaditana.

Mucho se ha escrito y hablado de la falta de iluminación , de la escasez de actividades durante las fiestas y de la baja calidad de la cabalgata , algo que -por cierto- viene repitiéndose desde hace años en la capital.

Pero desde luego la puntilla se la ha llevado el incidente del oso, las particulares muñecas Disney y la momia terrorífica (similar a la portada del disco de Iron Maiden) que han inundado las redes sociales de memes y comentarios que han tenido una repercusión mediática sin precedentes.

Lo que se podría haber quedado en una mera anécdota ha trascendido de tal manera que durante dos días no se ha hablado de otra cosa en Cádiz en parte del extranjero. Cierto es que había ganas de reirse y de bromear tras los tiempos tan duros que nos ha tocado vivir por culpa de un virus con el que parece que, de momento, tendremos que convivir.

Pero toda broma debe tener un límite y un final ya que, al fin y al cabo, detrás de ese oso ‘perjudicado’ hay una empresa con más de una década de experiencia y que al final ha resultado ser la máxima ‘perjudicada’ de esta situación que se ha creado a raíz del desfile del pasado 5 de enero.

Es cierto que Cádiz la ciudad del humor por excelencia y que los gaditanos lo llevan en la sangre pero como capital de provincia se debe de aspirar a ser mucho más . A ser referentes, a atraer turismo (también en estas fechas) y a no provocar que las familias opten por otras localidades porque la Navidad gaditana no es lo suficientemente atractiva.

Es ahí, precisamente, donde el Ayuntamiento de Cádiz tiene un gran reto por delante durante todo este año que acaba de comenzar, y de qué manera. Y, en concreto, la delegación de Fiestas dirigida por Lola Cazalilla , a la que los vecinos piden indignados su dimisión por el «ridículo» de la cabalgata que, a su juicio, ha provocado que Cádiz haya sido el «cachondeo de toda España».

Hasta la propia concejala ha pedido a través de sus redes que todo este huracán de risas cese de una vez: «Tomarnos en serio lo que requiere seriedad nos permite reírnos de lo anecdótico. Pero que en esta tierra tengamos la bendita capacidad de reírnos de casi todo, no justifica que desde otros lugares pretendan reírse de nosotros como tantas veces se ha hecho. De eso ya, ni mijita ».

Ni los niños, ni las niñas ni la sociedad gaditana en general se lo merecen.

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