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Milicianos del Estado Islámico desfilan por las calles de Al Raqa. / Afp

Los cuarteles del Estado Islámico en Siria se vacían ante un posible ataque aéreo de EE UU

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Los cuarteles del grupo yihadista Estado Islámico (EI) se han quedado vacíos en su bastión principal, la ciudad siria de Al Raqa, ante la inminencia de un ataque aéreo estadounidense, han informado fuentes de la oposición y testigos locales.

Los extremistas suníes están tomando medidas para protegerse tras el anuncio, hace una semana, del presidente de EE UU, Barack Obama, de que su país ampliaría a Siria la ofensiva contra los radicales.

El activista opositor Abu Ahmad, que reside en esa zona, ha explicado por internet que desde el miércoles por la mañana no queda ningún combatiente del EI dentro de sus bases y que la mayoría se ha trasladado a las afueras de la localidad. "Han abandonado completamente sus cuarteles y han enviado a sus familias a la periferia de Al Raqa o a Turquía", ha detallado el activista.

Equipamiento insuficiente para afrontar un ataque

Aparte de esta evacuación, han excavado nuevas bases bajo tierra para resguardarse de los bombardeos. Para Abu Ahmad, el EI "es incapaz de afrontar un ataque de aviones de EE UU con el equipamiento militar del que dispone en la actualidad". "Tan solo posee proyectiles que funcionan por infrarrojos para derribar los Mig (aviones de fabricación rusa) del régimen, que son con los que abatió recientemente uno del Ejército sirio", ha agregado.

Al Raqa es la única capital de provincia en Siria que ha sido completamente arrebatada al régimen de Bachar el-Asad y el feudo más importante en este país del EI, que en junio proclamó un califato en territorio sirio e iraquí.

Otro activista de Al Raqa, Abu Bakr, miembro de la red opositora Sham, ha subrayado que en los últimos días se han intensificado los movimientos de los yihadistas a lo largo y ancho de la provincia. "Han trasladado armas y las están desplegando en los alrededores y el interior de las ciudades", ha precisado el activista, quien ha destacado que, pese a la evacuación de sus cuarteles, aún se ven combatientes del EI en muchas calles de las poblaciones.

Miedo entre la población civil

Pero la amenaza de los bombardeos no solo ha puesto en alerta a la organización extremista, sino también a la población civil, que a su temor por los ya habituales ataques aéreos del régimen ha sumado la inquietud ante la futura ofensiva de EE UU.

El responsable del grupo llamado 'Al Raqa está siendo masacrada en silencio', que se identifica como Abu Mohamed, ha apuntado que "nadie se siente seguro y la gente no sale de sus casas". De hecho, muchos civiles se están desplazado a áreas rurales de la provincia, e incluso algunos han optado por huir del país y marcharse a la vecina Turquía. A esa psicosis se añade el hecho de que los miembros del EI que no han sacado a sus parientes de la ciudad los han escondido en casas en barrios residenciales, ha agregado Abu Mohamed. La vida cotidiana está llena de los sinsabores de la guerra, donde los alimentos brillan por su escasez y los cortes de agua y electricidad están a la orden del día.

Sin movimiento en Deir al Zur

Los civiles de Al Raqa no son los únicos que temen por sus vidas, sino también los de la provincia de Deir al Zur, que no descartan que los bombardeos de EE UU puedan llegar a sus localidades. Aunque Al Raqa es la plaza fuerte de los yihadistas en Siria, su presencia es importante en Deir al Zur, fronteriza con la provincia iraquí de Al Anbar y que el EI domina casi en su totalidad, a excepción de algunos barrios de su capital y el aeropuerto, en manos de las fuerzas gubernamentales.

En Deir al Zur no parece que los radicales sientan la misma amenaza en sus bases porque, de momento, no han hecho ningún movimiento para evacuarlas, ha apuntado por internet el activista local Abu Bakr al Farati. Quienes sí están temerosos son los civiles que residen en viviendas próximas a los cuarteles de los yihadistas y que están escapando a otras áreas por el peligro que suponen para ellos los ataques aéreos, tanto del Ejército sirio como del estadounidense.

Unos bombardeos, los de EE UU, que cada vez parecen más cercanos y que incorporan una incógnita más a la complicada ecuación en que se ha convertido la guerra en Siria, donde más de 191.000 personas han muerto en tres años y medio de contienda.