Manuel Fraga, en una imagen de archivo. / José Ramón Ladra
muere UNO DE LOS PADRES DE LA CONSTITUCIÓN

Perbes despide a Fraga al son de gaiteros

Sus restos mortales serán enterrados hoy en la localidad coruñesa de Perbes

LA CORUÑA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El presidente de honor del PP, Manuel Fraga, fallecido el domingo a los 89 años, descansa ya en el pequeño cementerio de Perbes, en el municipio coruñés de Miño, donde está enterrada su mujer, Carmen Estévez, a quien siempre expresó su deseo de acompañar cuando muriera.

El 15 de enero de 2006, fecha en la que cedió el testigo a Alberto Núñez Feijóo al frente del PP de Galicia, el veterano político aseguró que el día que falleciese le gustaría ser enterrado en Perbes, en donde tenían su residencia de verano. El destino ha querido que Fraga muriese justo seis años después de pronunciar aquella frase y que sea enterrado el día en que se cumplen 56 años del accidente aéreo de Palomares por el que durante unos días después ocupó las portadas de los medios de todo el mundo con su famoso baño.

Aún no eran las cinco de la tarde, hora fijada para el acto del sepelio, cuando la comitiva fúnebre, que desde Madrid trasladó los restos mortales, llegó a la capilla del cementerio, con el proverbial adelanto que Fraga imprimió siempre a todas sus citas. Allí esperaban sus seis hermanos y cinco hijos, quienes recibieron las condolencias de las personalidades desplazadas: miembros del Gobierno de España, el de Galicia en pleno y representantes de todos los estamentos de la política.

Bajo los acordes de la Marcha del Antiguo Reino de Galicia, el féretro, portado por varios de sus nietos, fue cubierto con una bandera de Galicia y otra de España. Durante casi una hora el cardenal Rouco Varela, acompañado por el Arzobispo de Santiago, Julián Barrio, ofició el funeral en presencia de los familiares y autoridades que completaban el aforo de la pequeña capilla.

Centenares de personas tuvieron que seguir la ceremonia desde los aledaños del recinto del camposanto, incapaz de albergar a todos los que, desde su amistad de vecinos de Vilalba o Perbes, llegaron desde muy diferentes puntos de Galicia y de otras provincias.

Autoridades y representaciones

El sepelio de Manuel Fraga reunió en la parroquia de Perbes, donde el político pasaba sus vacaciones de verano y donde falleció su esposa en 1996, a numerosas personalidades políticas y representantes institucionales. La ausencia obligada del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, fue cubierta por la vicepresidenta, Soraya Sáez de Santamaría, a la que acompañaban los ministros de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, de Sanidad, Ana Mato, y de Fomento, Ana Pastor.

Asistieron también los presidentes de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y de Asturias, Francisco Álvarez Cascos; el e presidente del gobierno, José María Aznar, con su esposa la alcaldesa de Madrid, Ana Botella; el exembajador en el Vaticano y exalcalde de A Coruña, Francisco Vázquez, el editor del diario coruñés 'La Voz de Galicia', Santiago Rey Fernández-Latorre, y otras personalidades entre las que estaban todos los miembros del Gobierno gallego.

Además, durante todo el día se sucedieron las colas en la casa natal de Fraga en Villalba (hoy sede de la Fundación Manuel Fraga Iribarne) para firmar en el libro de condolencias instalado allí para recibir el testimonio de los vecinos de la villa lucense.