El fallo sobre el chivatazo tensa a PP y PSOE
Rubalcaba acusa a los populares de "arrastrar por el suelo" el honor de la Policía
Actualizado:La decisión de la Audiencia Nacional de revocar el procesamiento de los tres mandos policiales por el chivatazo a ETA disparó el enfrentamiento entre el Partido Popular, de una parte, y el PSOE y el Gobierno de otra. Las promesas de ambas partes de dejar de lado la política antiterrorista dentro del debate partidista con vistas al 20-N fueron sustituidas por gruesas acusaciones cruzadas tras conocer el fallo que reconoce que hubo soplo al aparato de extorsión de ETA, pero que no hay indicios suficientes para sentar en el banquillo al exdirector de la Policía Víctor García Hidalgo, el jefe Superior del País Vasco, Enrique Pamiés, y el inspector José María Ballesteros.
Alfredo Pérez Rubalcaba, ministro del Interior cuando se produjo el soplo a ETA, ahora en su condición de candidato socialista no dudó en arremeter contra los populares, a los que directamente culpó de usar este sumario para desprestigiarle personalmente y atacar a las fuerzas de seguridad para tratar de eclipsar sus éxitos en la lucha antiterrorista.
"El PP me ha calumniado e insultado, a mí y al secretario de Estado (Antonio Camacho, ahora ministro del Interior), sesión tras sesión y ha arrastrado por el suelo el honor de policías muy serios, que se han jugado la vida en la lucha contra ETA, sabiendo que todos los etarras fueron detenidos y procesados", dijo. "Y lo ha hecho exclusivamente porque la lucha contra el terrorismo va bien", denunció el exvicepresidente, quien en el Congreso llegó a responder decenas de preguntas parlamentarias del PP sobre el 'caso Faisán'. Pérez Rubalcaba dijo sentirse "entristecido" por los ataques de los populares, precisamente ahora que "se está a punto de acabar con ETA".
Más comedido se mostró Camacho, a quien las acusaciones pidieron que se imputara en este proceso y que en 2006 era el jefe directo de García Hildalgo. El ministro del Interior, foco también de los ataques y las preguntas del PP en sede parlamentaria, sin nombrar expresamente a los populares, lesa esa actitud, dijo, "yo he estado siempre en estos últimos ocho años en el mismo lado, en el de defender el buen nombre y el buen hacer de los policías y de la Policía, sobre todo en la lucha antiterrorista".
También desde el Gobierno, su portavoz, José Blanco, atacó a la oposición. "No había ninguna razón para procesar ni a policías, ni al exdirector general de la policía. Todo el discurso político del PP de hablar de responsabilidades políticas y todas las acusaciones que hicieron al ministro del Interior han quedado sin ningún tipo de argumento", apostilló.
Y desde el PSOE fue el vicecoordinador de la campaña socialista, Antonio Hernando, el que exigió al PP que pida "disculpas" por sus "insultos", "persecuciones" y "difamaciones" porque la justicia tras cinco años de investigación ha llegado a la "conclusión de que "no hay nada de nada".
"Lo más grave"
La artillería pesada desde las filas 'populares' corrió a cargo de Esperanza Aguirre. La presidenta de la Comunidad de Madrid dijo que el fallo de la Sala de lo Penal que reconoce que hubo delito prueba que hubo "alta traición" y que, por tanto, es "lo más grave que ha ocurrido en España" en materia antiterrorista.
Mariano Rajoy, que desde el principio ha mantenido un perfil bajo en este asunto, insistió en su línea. El presidente del PP aseguró que su partido "sigue esperando explicaciones" sobre el caso por parte del Gobierno. "Respeto las decisiones de los tribunales, que han dicho que hay delito y que es bueno seguir investigando", se limitó a señalar.
La portavoz parlamentaria del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, también recalcó que la resolución judicial confirma por "unanimidad" que hubo "delito" y que lo que hay que aclarar ahora es "si los que estaban procesados son los únicos responsables o puede haber alguien más". Sáenz de Santamaría también se congratuló por el hecho de que el caso se quede en la Audiencia y no sea enviado a Irún "como pretendía y defendía la Fiscalía y el entorno del Gobierno".
La lectura más positiva del caso desde las filas populares la hizo Federico Trillo. El coordinador de Justicia y Libertades Públicas afirmó que el fallo del pleno confirma que hay "más Faisán que nunca". "La Audiencia Nacional ha confirmado que hubo un grave delito que es un chivatazo policial a ETA" y que es "evidente" que ese delito se cometió bajo el mandato de Pérez Rubalcaba al frente de Interior. "Se produjo un delito de lesa patria porque la Policía colaboró con ETA para que pudiera seguir recaudando fondos y para que no se descubriera por el juez la extorsión continuada", llegó a asegurar.