Irán libera a «varios» empleados de la embajada británica
El ministro de Asuntos Exteriores califica de "acoso inaceptable" la detención de su personal, acusado de participar en las protestas en el país
CORFÚActualizado:La Policía iraní ha puesto en libertad a "varios de los ochos empleados locales de la embajada británica" detenidos por su supuesta implicación en las protestas y los disturbios que han sacudido el país tras la polémica reelección del presidente, Mahmud Ahmadineyad.
Según el ministro de Inteligencia, Gholam Husein Mohseni Ejei, los empleados fueron enviados por la propia legación británica a las marchas para "recopilar información e inculcar ciertas ideas a los manifestantes y a la sociedad". "La embajada británica desempeñó un papel crucial en los recientes disturbios a través de los medios de comunicación pero también de su plantilla", afirma el ministro, a quien cita la agencia de noticias estatal Irna. "Tenemos fotos y vídeos de ciertos empleados de la embajada británica en las manifestaciones".
La agencia de noticias Fars había anunciado esta mañana que la Policía iraní había arrestado a ocho empleados locales de la embajada británica en Teherán por su supuesta implicación en los disturbios, en los que murieron al menos ocho personas. Horas después, el ministro de Asuntos Exteriores, David Miliband denunció la acción como "un acto de acoso e intimidación totalmente inaceptable" y exigió la inmediata liberación de los detenidos.
Malas relaciones entre ambos países
La semana pasada, el ministerio iraní de Asuntos Exteriores confirmó la expulsión de dos diplomáticos británicos a los que acusa interferir en los asuntos internos del país. Mañana deberán abandonar Teherán el primer y el segundo secretario de la legación diplomática. En una decisión recíproca, el primer ministro británico, Gordon Brown, anunció la expulsión de Londres de otros dos diplomáticos iraníes.
Las siempre tensas relaciones entre ambos países se deterioraron en la última semana, después de que Irán acusara al Reino Unido de estar detrás de las protestas y disturbios postelectorales. La semana pasada, Irán llamó a consultas a su embajador en Londres para protestar por lo que considera "una injerencia" británica en sus asuntos internos.
Hace una semana, Irán expulsó al corresponsal permanente en Teherán de la televisión británica BBC, John Leyne, acusado de instigar los disturbios con sus informaciones.