Robert Mugabe: «Zimbabue es mío. Nunca, nunca dimitiré»
El presidente africano se despoja de las críticas internacionales y señala que son "una sarta de mentiras"
LONDRES Actualizado: GuardarEl presidente de Zimbabue, Robert Mugabe , ha afirmado que el país es suyo y ha insistido en que no va a dimitir. "Zimbabue es mío. Nunca, nunca, nunca dimitiré", ha declarado ante los delegados de su partido, el ZANU-PF, en su congreso anual.
Según informa la BBC, en su discurso ha hecho hincapié en que "las únicas personas con poder para destituir a Robert Gabriel Mugabe es el pueblo de Zimbabue". "Yo soy zimbabuense, Zimbabue para los zimbabuenses", ha exclamado el mandatario.
En referencia a los llamamientos que llegan desde otros países africanos para que dimita, Mugabe ha señalado que las críticas hacia la gestión de su Gobierno por la crisis del cólera son "una sarta de mentiras". "No me van a intimidar. Incluso aunque me amenacen con decapitarme, nada me va a mover de aquí: Zimbabue nos pertenece a nosotros, no a los británicos", ha añadido.
Críticas de todo el mundo por su gestión en el brote de cólera
Las críticas al Ejecutivo de Mugabe llegan de todas partes del mundo, sobre todo desde que el brote de cólera ha acabado con la vida de más de 1.000 personas y decenas de miles están enfermas. La expansión de la enfermedad por el país ha puesto de manifiesto la mala gestión de las infraestructuras, sobre todo las de saneamiento de aguas, obligando a muchos zimbabuenses a beber y bañarse con agua de las alcantarillas. Los hospitales están colapsados y los pocos médicos que hay no pueden atender a todos los enfermos.
El primer ministro británico, Gordon Brown, ha arremetido hoy de nuevo contra Mugabe con una invitación a los gobernantes de los países del sur de Africa a sumarse a una iniciativa para "dejar claro el apoyo a los demócratas, no a los que se aferran al poder".
En la habitual rueda de prensa que ofrece cada mes en su residencia oficial de Downing Street, en este caso la última de 2008, Brown ha acusado a Mugabe de quebrar las normas básicas de convivencia al "aferrarse al poder sólo porque la democracia no los apoya", como puso de manifiesto el resultado de las presidenciales de este año, tras casi tres décadas de hegemonía del ZANU-PF.
Senegal retira su apoyo al mandatario
Del mismo modo se ha pronunciado la secretaria de Estado adjunta para Asuntos Africanos, Jendayi Frazer, quien ha señalado que en Zimbabue hay "un completo fracaso", por lo que ha subrayado que Mugabe necesita dimitir.
Pero en opinión del presidente zimbabuense, ningún país africano "es lo suficientemente valiente" para echarle del poder. "¿Cómo podrían los líderes africanos derribar a Robert Mugabe u organizar un ejército para entrar aquí?", se ha preguntado. "Sería una guerra innecesaria (realizada) de forma estúpida porque una persuasión estúpida proviene de fuentes estúpidas", ha insistido.
El último líder africano en unirse a la larga lista de los que piden la dimisión de Mugabe ha sido el presidente senegalés, Abdoulaye Wade. En declaraciones al diario francés La Croix, ha reconocido que apoyó al zimbabuense en el pasado, pero que se ha dado cuenta de que el mandatario es la causa de los problemas del país.