El líder de la oposición de Zimbabue, Morgan Tsvangirai, toma la palabra para anunciar que no se presentará a las elecciones previstas para el 27 de junio por la creciente campaña de violencia del gobierno de Mugabe, en Harare. /EFE
previstas para el 27 de junio

El líder de la oposición de Zimbabue se retira de las elecciones por la campaña de violencia del Gobierno

En la primera vuelta de los comicios, celebrada el 29 de marzo, ninguno de los candidatos consiguió la mayoría absoluta necesaria para proclamarse vencedor

HARARE Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El presidente del partido Movimiento para el Cambio Democrático (MCD) y líder de la oposición de Zimbabue, Morgan Tsvangirai, ha anunciado que no se presentará a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, previstas para el 27 de junio, por la creciente campaña de violencia e intimidación orquestada por el gobierno de Robert Mugabe y su partido oficialista, el ZANU/PF, según han señalado fuentes del partido.

En la primera vuelta de los comicios, celebrada el 29 de marzo, el partido de Mugabe obtuvo menos apoyo que el del líder aunque ninguno de los candidatos consiguió la mayoría absoluta necesaria para proclamarse vencedor, por lo que finalmente se estableció una segunda vuelta para el 27 de junio. El MCD acusa a Mugabe de haber manipulado los resultados.

Con esta decisión, Tsvangirai espera dar un toque de atención a las instituciones internacionales para que reconozcan la gravísima crisis política que atraviesa el país africano, gobernado por Mugabe desde su independencia de Reino Unido en 1980. Tsvangirai ha reiterado que "el MDC ganó las elecciones del 29 de marzo a pesar de la ausencia de libertad y justicia". Tsvangirai obtuvo el 47,9% de los votos y Mugabe un 43,2%, aunque el MDC nunca lo aceptó por creer que estaban amañados para favorecer al presidente.

Según el líder opositor, el resultado confirmó los deseos de un cambio en el país, y desde entonces Mugabe está llevando a cabo una guerra contra la gente de Zimbabue. Más de 200.000 personas se han visto obligadas a desplazarse dentro del país y más de 86 partidarios del MDC han sido asesinados, según ha asegurado. "Cualquiera que me vote en la segunda vuelta sabe que tiene muchas posibilidades de ser asesinado", ha explicado.

Tsvangirai no cierra la puerta a negociar

La primera reacción a la retirada de Tsganvirai ha procedido del Gobierno sudafricano, mediador en el diálogo político en Zimbabue, que, aunque ha lamentando la decisión del líder opositor, ha mostrado no obstante su alivio al comprobar que el MCD no ha dejado a un lado sus intenciones de negociar con el ZANU-PF para alcanzar un acuerdo que resuelva el conflicto en el país africano, iniciado tras la polémica primera vuelta del 29 de marzo.

"Nos anima ver que el propio Tsvangirai haya reconocido que no cierra la puerta completamente a las negociaciones", ha declarado en este sentido el portavoz de la presidencia sudafricana, Mukoni Ratshitanga.

La decisión de retirarse de las elecciones podría estar causando divisiones internas en el partido, puesto que ayer el tesorero del MDC, Roy Bennett, hizo público en un comunicado que Tsvangirai se presentaría a las elecciones del 27 de junio.

El Gobierno pide la retirada por escrito

Por su parte, el Gobierno zimbabuense ha reconocido la retirada del líder del MCD, pero ha insistido en que el anuncio se formalice por escrito como requisito previo para cancelar la segunda ronda. "Tsvangirai debe escribir formalmente a la Comisión Electoral para transmitir su retirada, que en el caso de que se limiten a un solo candidato, no tendrán lugar. Si no lo hace, proseguirán los preparativos para la segunda vuelta", ha explicado el ministro de Justicia, Patrick Chinamasa.

El MCD ha denunciado en numerosas ocasiones al Gobierno de Zimbabue por emplear tácticas violentas de represión para atemorizar a sus partidarios y manipular el resultado de las elecciones. La última de ellas ha tenido lugar esta misma mañana, cuando miembros del MCD han informado de la interrupción de un mítin que tenía previsto pronunciar Tsganvirai en la capital, Harare, a manos de partidarios "armados" y "milicias juveniles" del ZANU-PF, que ha desmentido estas acusaciones.