El País Vasco vive una nueva jornada de violencia callejera

El país Vasco ha vivido episodios de violencia callejera durante toda la jornada, el mismo día en que la Audiencia Nacional ha decidido que el preso de ETA José Ignacio de Juana Chaos debe continuar en la cárcel a pesar del que su salud se deteriora tras 80 días en huelga de hambre.

El último altercado se ha producido en la localidad vizcaína de Getxo, donde agentes de la Ertzaintza han tenido que dispersar a un grupo de encapuchados que intentaba quemar un autobús.

El autocar sólo ha sufrido la rotura de lunas a consecuencia de piedras lanzadas por los radicales, según informó el Departamento de Interior vasco.

Sabotaje en Bilbao

Poco antes, En Bilbao, un grupo de radicales ha prendido fuego a varios neumáticos colgados en un puente peatonal sobre la autopista A-8, lo que ha causado retenciones en el tráfico en sentido Cantabria.

El sabotaje, ocurrido a las siete y diez de la tarde, ha provocado retenciones al intentar evitar los vehículos pasar por debajo de los neumáticos, que fueron apagados pocos minutos después por los bomberos.

Un menor detenido

La pasada madrugada, efectivos de la Ertzaintza detuvieron en Mungia (Vizcaya) a un menor de edad acusado de desórdenes públicos en unos incidentes en los que un grupo de jóvenes lanzaron objetos a los agentes policiales, que cargaron contra ellos con material antidisturbios.

Según fuentes del departamento vasco de Interior, los incidentes se registraron sobre las tres de la madrugada cuando un grupo de jóvenes trataba de manifestarse en calle Lauaxeta Olerkari del municipio.

Ataques a sedes socialistas

También durante la madrugada en la localidad alavesa de Llodio, unos desconocidos atacaron con pintura la Casa del Pueblo, y realizaron pintadas con el lema 'Segi Borrokan' (Seguir en la lucha).

Otro grupo de desconocidos lanzaron pintura contra la fachada de la sede del Partido Socialista en el municipio vizcaíno de Iurreta.