La entidad se constituyó hace quince años y desde entonces Pepi Aibar está al frente como presidenta, quien a lo largo de estos años ha dado varias conferencias e incluso ha salido en un programa de TV relatando su testimonio. Nadie mejor que ella conoce la lucha por salir adelante, sus ganas de vivir y su afán de superación le han devuelto la cotidianidad que tenía antes de ser intervenida de corazón y de sufrir un derrame cerebral. Por ello, se muestra vital y jovial con la labor tan vocacional que desempeña: ayudar a las personas que comparten su enfermedad.
-¿Cómo surgió la asociación y quiénes la conforman?
-La idea surgió para aglutinar a los pacientes de El Puerto que comparten la patología, y así, ayudar a personas que han pasado por lo mismo, ya sea por anticoagulación o cirugía cardiaca. Yo estoy operada de corazón y tengo una válvula, además me dio un derrame y no conocía a nadie, nuestro cerebro es un disco duro y yo he tenido que empezar de nuevo. Por ello, lo que tratamos es la identificación entre nosotros y con nuestra propia experiencia ayudamos y es el mensaje que trasmitimos, hacemos visitas hospitalarias y domiciliadas, ya sea para hablar del tema o dar apoyo a todos los que se enfrentan a un proceso quirúrgico o a una nueva vida.
-Sin duda, una labor gratificante...
-Por supuesto, porque estamos ayudando a personas con tratamientos anticoagulación que, por ejemplo, hay mucho desconocimiento sobre el tema, que implica también restricciones en la alimentación porque no podemos consumir la vitamina K. En este sentido, también se les ayuda a convivir con las limitaciones que tendrá en su nueva vida, ya que hay pacientes que han sufrido un infarto y ya no pueden andar sino pasear. Y tenemos programas que fomentan el deporte y las ganas de seguir viviendo.
-¿Qué destaca de la conferencia anual de este año 2015?
-Este año, la cita será en el Hotel Santa María, a partir de las 17.30 horas, y se centrará en la enfermedad tromboembolica venosa, cuyas ponentes serán las doctoras Rosario Conejero Gómez y Rosa María Campos Álvarez. Pero, además de las conferencias en sí, lo más importante es la ronda de preguntas finales en las que cualquier persona puede interactuar. La entrada es libre y suelen asistir muchos portuenses, porque son convocatorias bastante conocidas en la provincia y la gente suele repetir para asistir al diálogo con los profesionales del sector, al ver su sencillez y cercanía ante las inquietudes de los pacientes y sobre todo, con la labor que desempeñan. También aprovechamos ese día para invertir en convivencia.
-¿Piensa que la Sanidad, ya sea pública o privada, asesora correctamente a estos pacientes con respecto a su cambio de vida?
-En este sentido, pienso que las asociaciones juegan un papel fundamental por el día a día, las charlas y conferencias que hablan del tema. También la falta de personal en los centros sanitarios dificulta esta labor porque no pueden ayudar a los pacientes de la misma manera que una persona que ya ha pasado por eso, que sabemos qué consejos darles, porque hay que aprender a convivir con esta enfermedad.
-¿De qué se sustenta la entidad?
-Lo divulgativo lo manda la Federación Española de Anticoagulados (Feasan) y lo demás lo afrontamos con subvenciones del Ayuntamiento, del que estamos muy agradecidos desde siempre por habernos cedido gentilmente el local desde que empezamos.
-¿Qué actividades os quedan por desarrollar?
-El día 29 de septiembre celebramos el Día Mundial del Corazón con mesas informativas a las que acude mucha gente a modo de consulta. Y también el día 18 de noviembre celebramos el Día Nacional del Paciente Anticoagulado.