Hoy comienza el curso y todavía no saben cómo van a hacer para poder llevar a sus hijos a la escuela, trabajar y luego recogerlos. Casi un centenar de alumnos de los antiguos colegios de Defensa se han quedado sin plaza para el aula matinal y el comedor, imposibilitando que sus padres puedan compatibilizar la vida laboral con las responsabilidades familiares.
Precisamente ayer un grupo de afectados mantuvo un encuentro con la alcaldesa, Patricia Cavada, y salieron desanimadnos del mismo ya que no hay una solución al problema. La regidora les explicó la mediación que ha realizado con la Junta y que ahora tienen que esperar a las reubicaciones que se realizan en cada inicio de curso para valorar las alternativas. Según los padres, «lo que no ha dicho es que mientras tanto con el dinero con el que íbamos a pagar el comedor contratemos a una persona que se haga responsable de los pequeños». Los progenitores volvieron a insistir en la necesidad de encontrar una solución al conflicto de manera inmediata.