lavozdigital.es
logo ABC.es
nuboso
Hoy 5 / 18 || Mañana 7 / 16 |
más información sobre el tiempo
Estás en:
España en cambio: 24M
Actualizado: 01:13

Artículo

España en cambio: 24M

Día 23/05/2015 - 13.13h

Hace cuatro años una consigna recorrió Europa: Indignaos! El origen, un pequeño libro -por alguna razón los mejores libros son siempre pequeños y baratos- escrito por Stéphane Hessel, una de las personalidades que participaron en la comisión presidida por Eleonor Roosvelt para redactar la Declaración Universal de los Derechos Humanos, aprobada en sesión solemne de la ONU de 10 de diciembre de 1948, sin ningún voto en contra y seis abstenciones: Sudáfrica y cinco de los Estados de régimen soviético, estos por disconformidad a que se incluyera el derecho a la propiedad privada. Este texto pretendía recoger un nuevo orden universal como forma de superar las injusticias que condujeron a la guerra mundial. Y por eso los Estados miembros se comprometían a garantizar todos los derechos fundamentales de los hombres y las mujeres: vida, vivienda, salud, enseñanza, bienestar económico, cultura, medio ambiente, sistema de pensiones. Hessel denunciaba en su libro que el Poder Financiero había presionado a los Estados para conculcar estos derechos: «Los bancos privatizados se preocupan en primer lugar de sus dividendos y de los altísimos sueldos de sus dirigentes, pero no del interés general». El presidente del gobierno español Zapatero forzado por la Banca modificó en julio de 2011 nuestra Constitución mediante Decreto pactado con la oposición de derechas; fue el inicio de una escalada que ha ido destruyendo los servicios y las prestaciones públicas para atender los intereses del Poder Financiero sin concesión alguna a los derechos humanos. La marea de indignación que habían protagonizado los jóvenes del 15M generó una formación política nueva que en muy poco tiempo ha captado buena parte del electorado. A su vez un sector del voto conservador abandona un PP desgastado por la corrupción y las políticas austericidas y se desplaza a una formación liberal joven nacida en Cataluña.

En las elecciones andaluzas que los socialistas adelantaron para anticiparse a su declive tras casi cuarenta años de gobierno, los resultados consolidan la tendencia al descenso de los partidos del pos franquismo, así como la irrupción firme de las nuevas formaciones no contaminadas por el modelo de 1978, tal como ya se preludiaba en las elecciones europeas de mayo de 2014. Una nueva consulta electoral, las municipales y autonómicas de mañana 24M, va a aclarar más la situación. Las formaciones del bipartido producto del sistema que configuró la Transición muestran un nerviosismo que les conduce a torpezas tales como el despliegue de descalificaciones de El País, medio muy próximo al PSOE, tras la dimisión de Monedero, olvidando las legítimas disensiones entre socialistas poco antes de acceder al poder, incluyendo la dimisión del propio Felipe González. O las falsas acusaciones de complicidad con ETA vertidas por Esperanza Aguirre contra su rival que fue Relatora de Naciones Unidas. Precisamente destacan, tanto la candidatura madrileña de una personalidad del prestigio de Manuela Carmena, como la de Ada Colau en Barcelona que ha liderado a los afectados por la estafa hipotecaria que el PSOE y el PP han amparado. La prensa internacional sigue con asombrado interés nuestro proceso de cambio, y se desatan simpatías en torno a los nuevos líderes, jóvenes, valientes y desenfadados. Mañana se deciden todos los gobiernos municipales y los de trece comunidades autónomas; las encuestas anuncian buenos resultados para las nuevas formaciones allá donde éstas se presentan y malos presagios para los viejos partidos, pero solo las urnas pueden anunciar o no el gran cambio que muchos esperan en las generales de noviembre.

Compartir

  • Compartir

Comentarios:

lavozdigital.es

EN CUALQUIER CASO TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS:
Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa.