El hallazgo de un cuerpo en el maletero de un Volkswagen Golf parecería el nudo central de una trama de suspense si no fuera porque es la pura realidad. Y ésta ocurrió el jueves en el diseminado de El Puerto. Los vecinos alertaron al mediodía que un vehículo estaba ardiendo, cuando los bomberos sofocaron el fuego comprobaron que en el interior del maletero, donde se encontraba el foco de las llamas, había un cadáver.
Con esos mimbres, la Policía Nacional comenzó a trabajar sobre la pista de un asesinato con firma mafiosa. Las primeras pistas con las que iniciaron la elaboración del atestado: el vehículo y las denuncias de desaparecidos que se hubieran presentado en las últimas semanas. Ambas líneas se cruzaron rápidamente en una misma persona: Ángel R. P., quien fuera gerente del prostíbulo Oh! Puerto, que pasó a llamarse hace unos años Oh! Palace.
El vehículo incendiado era uno de sus coches y su pareja había denunciado hace unos días la desaparición de este conocido empresario local por sus negocios de alterne, según confirmaron a LA VOZ fuentes del caso.
A estos indicios sólidos faltaba la confirmación irrefutable del resultado de las pruebas forenses. Las mismas fuentes recalcaban que el cuerpo fue recuperado en mal estado (calcinado parcialmente) pero los agentes obtuvieron la identificación rápidamente porque Ángel R. P. ya estaba fichado. Si bien, las fuentes oficiales del Cuerpo Nacional siguen guardando silencio porque la autoridad judicial ha decretado el secreto de sumario.
Aunque en un primer momento se informó que el cuerpo estaba maniatado, este dato ha sido desmentido. La víctima fue ejecutada de un tiro en la cabeza y su cuerpo fue introducido en el coche, trasladado hasta la zona de las Dos Palmeras y allí le prendieron fuego al vehículo.
Las bomberos llegaron a tiempo y las llamas no destrozaron por completo el turismo, tan sólo la parte de atrás; lo que puede facilitar la labor de investigación iniciada por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría portuense.
Como se intuía desde un primer momento, dada las circunstancias en las que apareció el cuerpo de Ángel R. P., el asunto parece estar irremediablemente salpicado por sus turbios negocios y el resultado final ha sido un ajuste de cuentas. Su club portuense ha sido escenario de tiroteos y agresiones y hasta su apertura estuvo rodeada de polémica. En 2010, la Guardia Civil acusaba al exalcalde Hernán Díaz (IP) de haber firmado una serie de decretos para autorizar licencias a sabiendas de que contravenían la normativa urbana del municipio. Entre las licencias autorizadas estaba la ampliación de este club de alterne que antaño fue una discoteca.
Este empresario ya fue detenido en 2013 dentro de una investigación ('operación Adán') llevada a cabo por la Policía Nacional en la que fueron arrestadas en una primera fase otras 17 personas por delitos relativos a la prostitución, pertenencia a organización criminal, contra la Hacienda Pública, blanqueo de capitales, contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, tráfico de influencias, cohecho y trata de seres humanos.
Acusó a jueces y policías
En ese asunto, el empresario declaró en sede judicial que funcionarios policiales y jueces llevaban décadas visitando sus locales y que nunca antes había sido denunciado. Era su defensa a la hora de negar cualquier vinculación con el crimen organizado. Llegó a indicarle a la jueza que estaba dispuesto a aportar nombres de sus clientes para que verificara esa información.
Días después tuvo que retractarse de esa declaración tan comprometedora, alegando ante la misma jueza que no había querido señalar a nadie.
Además del Oh Palace!, que en estos momentos se encuentra cerrado, Ángel R. P. gestionaba otro club de la provincia en Los Barrios, el Platinium.
