Pocos dirigentes políticos de la provincia como José Loaiza tienen mejor perspectiva. Gobierna el Ayuntamiento de una ciudad de más de 100.000 habitantes, San Fernando, y también preside la Diputación, lo que le obliga a descubrir la realidad de las poblaciones más pequeñas.
Está en la mejor situación para conocer la provincia. Desde la primavera de 2011, compagina ambos cargos y se muestra dispuesto a repetir, en los dos, a partir de las próximas elecciones municipales si su partido se lo encarga. Y si obtiene los votos suficientes.
José Loaiza García (San Fernando, 4 de abril de 1958) se muestra optimista en plena era de la crispación y las dudas. Acepta que los nuevos retos electorales son distintos, desconocidos, pero está lejos de mostrarse asustado.
- ¿Alguien le ha reprochado el pluriempleo en estos años, la doble condición de alcalde en un municipio tan poblado y de presidente de la Diputación?
-En todo caso, supone un esfuerzo de trabajo. Pero tengo una ventaja: en ambas instituciones cuento con un gran equipo y, por lo tanto, se puede delegar. Cuando delegas, las cosas funcionan mejor. Egoístamente, para San Fernando creo que ha sido bueno tener como alcalde al presidente de la Diputación. Sólo me lo reprochan desde dos sitios: mi familia, a la que siempre acabas por quitarle tiempo, y el PSOE de San Fernando. La oposición cree tener una baza con el argumento de que no estoy en la ciudad. Un alcalde puede estar en Cádiz o en Madrid. Quiere hacer ver como negativo lo que es positivo. Pero el ciudadano no me lo reprocha. Te puede echar en cara que te ve poco en la calle pero estar dando besos y saludando quita tiempo para gestionar. Una ciudad necesita gestión, y más en esta época.
- ¿Si los resultados electorales lo permiten está dispuesto a repetir otros cuatro años como alcalde y presidente o ha cumplido una etapa?
-Depende de mi partido pero me encantaría repetir en la doble condición porque han sido cuatro años de iniciar proyectos, de empezar a cambiar cosas. En Diputación fue necesario empezar a cambiar estructuras de 30 años de gobiernos socialistas. En el Ayuntamiento, también. Esos cambios no se pueden consolidar en solo cuatro años. El Ayuntamiento de San Fernando era del siglo XIX, con todos mis respetos a los trabajadores, con muy buenos empleados públicos, pero funcionaba como un ayuntamiento antiguo. Estamos modernizando estructuras. Y la nueva Ley de Racionalización obliga a cambiarlas más. Sobre todo para asistir mejor a los municipios pequeños.
- Hace bien poco estaba en boga el debate sobre la desaparición de las diputaciones ¿Ya sirven para algo? ¿Queda algo de esa discusión de hace cinco años?
-En la provincia, ese debate ha desaparecido porque la Diputación, si no existiera, habría que inventarla. Rajoy lo decía. Sobran los malos gobiernos, no las diputaciones. En Cádiz, estamos presentes en toda la provincia y para bien. La hemos abierto. La asistencia a municipios es fundamental.
- Ha sido necesario salir al rescate económico de varios. Entendido como pagar nóminas y facturas, directamente.
- Hemos tenido que ir al rescate de varios. Y de alguno grande, incluso. Recuerdo Barbate, Prado del Rey, ahora Puerto Serrano. Muchos más. Hasta Sanlúcar. Esta semana hemos entregado una obra al Ayuntamiento de Conil, de recuperación del río Roche, que sin la Diputación no se haría. Muchas obras como esas, sencillamente, no se iniciarían. Y cuanto más pequeño el municipio, más necesaria esa colaboración.
- Se le ve ilusionado con el trabajo en Diputación pero las casas de apuestas políticas le dan muy pocas opciones al PP de repetir presidencia ¿Está recogiendo ya sus cosas del despacho?
- No, no estoy recogiendo. Tenemos las mismas posibilidades que otros. Es cierto que los pactos de gobierno, para nosotros, son más complicados que para los demás pero nadie esperaba que tuviéramos mayoría absoluta en la Diputación en 2011. Nosotros decíamos que sí. Todos, que no. Y la conseguimos.
- ¿Ahora no lo ve más difícil que entonces, con esa anunciada división de los votos en nuevos partidos, en muchos grupos pequeños?
- Lo veo igual de difícil que hace cuatro años. Ni menos, ni más. La fragmentación del voto también tiene una consecuencia: que sirve para afianzar al partido más votado. Y tenemos muy claro que el PP va a ganar las elecciones en esta provincia. Además, con diferencia. La fragmentación puede suponer que haya muchos grupos más pequeños y ninguno con mayoría. Pero también supone que se beneficia más al que más votos tiene.
- Parece optimista en plena tormenta. Cualquiera diría que se ve otra vez presidente de la Diputación y alcalde.
- Lo de alcalde de San Fernando lo tengo seguro. Lo de presidente de Diputación no depende de las elecciones. Sólo depende de mi partido.
- ¿Quiere decir que por votos en la provincia lo conseguiría seguro?
- Por votos, sí. Yo soy optimista.
San Fernando
- Pero admita que no se ha visto en otra. Que serán las elecciones más extrañas y apasionantes que se recuerden. Una situación social desconocida.
- Apunta a eso. A fragmentación del voto. A partidos pujantes durante años que casi van a desaparecer. A otros de nueva aparición. Pero lo importante será basarse en el trabajo del partido propio. Y exponerlo. Es verdad que existe una incógnita respecto a ese nuevo voto. Pero luego, los días electorales no siempre tienen que ver con las vísperas. Luego votan personas, con todo el sentido común. Y además, las elecciones que vienen son municipales. En esas pesan mucho las personas, además de los programas y las preferencias. Las elecciones locales tienen un componente que no tienen autonómicas y generales: las personas que van en las listas influyen mucho. La prueba está en que hemos visto a muchos alcaldes de listas independientes porque se vota a la persona.
- Con ese argumento como premisa ¿qué proyecto puede ofrecer José Loaiza a los votantes de San Fernando la próxima primavera? ¿Qué les dirá a los que esperan empleo cuando un ayuntamiento apenas tiene capacidad en ese apartado vital?
- El empleo no es competencia municipal. Depende mucho de la situación económica del país, lo hemos visto. También de las políticas activas de empleo que dependen de la comunidad autónoma, que es la mayor responsable. Un Ayuntamiento sólo puede poner las bases para que haya una mayor actividad. Sólo podemos proponer una administración saneada que dé credibilidad. Hemos preparado la ciudad bajando las tasas para que vengan a instalarse pequeñas y medianas empresas o industrias. Hemos eliminado la licencia de apertura para negocios menores...
- Habla de credibilidad pese a que su Ayuntamiento vivió un trauma como el desfalco de casi ocho millones ¿Es posible transmitir confianza con esa mancha? ¿Se ha superado?
- Lo que hemos conseguido es que el Ayuntamiento esté organizado de forma que cosas como esas no puedan volver a pasar. Todo el mundo puede saber qué se gasta y en qué se gasta. Hemos demostrado dejar atrás la imagen de un ayuntamiento al que se le perdió el dinero. Hoy, es un Ayuntamiento que controla su dinero, el de los vecinos, y que optimiza su gasto. Eso lo hemos conseguido. Siempre he defendido que el que la hace debe pagarla. Hubo unas responsabilidades políticas que se pagaron. Porque el partido que gobernaba esta ciudad ya no gobierna. Está en coalición pero no es lo mismo. El apartado penal está abierto y creo que hay responsabilidades. El aspecto patrimonial ya está incluso condenado, aunque esté en recurso. Es decir, el que la hace, la paga.
- ¿Usted se imagina como alcalde montado en el tranvía por la calle Real?
- El problema es que, con el ritmo que lleva, el tranvía no lo veo. Me gustaría que pasara o dejara de pasar. Veremos el tiempo que tarda en funcionar o no pero el problema es que, hoy, todo son perjuicios para la ciudad. Los plazos nunca se cumplen. Es un proyecto que nunca se pensó de verdad, es improvisado. No tiene capacidad eléctrica, por ejemplo. Necesita una subestación que, donde se dijo que se iba a poner, no se puede hacer. Hemos ofrecido que sea en Janer pero está costando un mundo hacerlo. Hay muchos problemas que no están cerrados entre Junta, Ayuntamiento y Endesa. Hasta dentro de un año, no habrá electricidad para el tranvía, como mínimo. No está cerrado el paso por Chiclana, ni lo de Renfe en Cádiz. No está asegurado que las unidades puedan 'dormir' en Jerez. La Junta le echa la culpa a Adif y Renfe que lo único que piden son papeles. Es permanente la improvisación en la gestión, en la planificación, en todo. Es una chapuza por dónde se mire. Yo espero ver el tranvía en marcha alguna vez. Pero porque espero ser alcalde muchos años. Desde luego, en los próximos cuatro años, no creo.
- ¿El próximo mandato será el del funcionamiento normal del hospital de San Carlos?
- Espero que sí. En un año no se puede poner un hospital a funcionar plenamente. Pero sí, en un año, podía dar algún servicio, en algunas plantas. En un año, por ser generoso, podría estar al 70%. Eso sería bueno, no para San Fernando, sería positivo para toda la Bahía. Estamos viendo en estas fechas los codazos en urgencias, con las camas. Y en San Fernando tenemos once plantas de un hospital vacías. Su entrada en servicio sería buena para Cádiz, para Chiclana, para Puerto Real, La Janda, para todos. En la Bahía, somos más de medio millón de habitantes. Pero, la verdad, no estoy seguro de que en un año esté en funcionamiento porque he aprendido que nadie se puede fiar de la Junta. La red ambulatoria y sanitaria, en general, en toda la provincia, tendría que estar hecha ya en toda la provincia. Y no está. En San Fernando tenemos los mismos centros de salud que cuando yo iba al colegio. Que ya han pasado años.
- ¿Defensa le ha dado una tregua temporal a San Fernando con el Cefot o es la paz definitiva y se queda?
- No es una tregua. En esta reestructuración, el centro no mueve. Lo que haga el Gobierno dentro de seis, de ocho años, ya no podemos adivinarlo. Como han dicho sobre la continuidad de Messi, nadie saber lo que depara el futuro. Pero mientras no haya otro plan de reestructuración, se queda.