El presidente Kennedy ha muerto víctima de un atentado cuando recorría la ciudad en un automóvil abierto, acompañado del gobernador del Estado de Tejas, John B. Connally.
El atentado contra el presidente Kennedy se produjo cuando se dirigía a un almuerzo ofrecido en su honor por el Consejo de los Ciudadanos de Dallas, donde debería pronunciar un discurso. Cuando pasaba por el centro de la ciudad, el presidente cayó abatido por tres disparos que le alcanzaron la cabeza.
Testigos presenciales afirmaron que la sangre manaba en abundancia de la cabeza del presidente, mientras que su esposa, que estaba al lado, se inclinaba sobre él gritando: "¡Oh, no!".
Un fotógrafo del séquito presidencial manifestó por su parte que el presidente sangraba por la cabeza. Añadió que había escuchado varios disparos y que enseguida vio sangrar al presidente.
El presidente Kennedy fue trasladado inmediatamente al Hospital Parkland de Dallas en una ambulancia. Entre el momento de los disparos y la llegada de los autos al hospital pasó un tiempo de cinco minutos. Los pocos periodistas que se hallaban en las proximidades del auto presidencial manifestaron que el presidente se hallaba tendido sobre los asientos del auto.
El cortejo de automóviles que acompañaba al presidente se disolvió con la mayor velocidad por orden de los servicios secretos, pero en medio de la mayor confusión.
La noticia llega a los suyos
Los padres del presidente Kennedy fueron advertidos de que su hijo había sufrido un atentado.
Un empleado de la familia oyó la noticia por la radio y corrió a la casa de los padres del presidente para comunicarles la noticia. El señor Kennedy tiene 75 años y su esposa 72. "Nada puedo deciros sino que dos sacerdotes han sido llamados a su cabecera", ha declarado el secretario de Prensa de la Casa Blanca a los periodistas.
Anuncio del fallecimiento
El presidente Kennedy falleció a las veinte (hora española). Malcolm Kinduff, ayudante del secretario de Prensa de la Casa Blanca, anunció oficialmente la muerte del presidente.
El presidente Kennedy solamente ha sobrevivido media hora al atentado de que ha sido víctima.
Gritos de pesar de la multitud
La multitud que se había congregado ante el hospital de Parkland de Dallas, donde acaba de expirar el presidente Kennedy, ha prorrumpido en gritos de pesar y llantos cuando uno de los sacerdotes que ha administrado los últimos Sacramentos al moribundo anunció que, en efecto, el primer magistrado de la nación había muerto.
Alcanzado por un rifle
La cadena radiodifusora norteamericana National Broadcasting Corporation (NBC) ha dado cuenta de que el presidente Kennedy ha muerto a consecuencia de un balazo de arma larga en la cabeza.
La Policía de Dallas ha informado que se ha apoderado de un rifle que no es de fabricación norteamericana.
El gobernador del Estado de Tajas ha sido alcanzado también por proyectiles de rifle en la cabeza y en una muñeca. Se encuentra internado en el hospital.
Dos agentes
Los dos miembros del servicio de seguridad del presidente (un agente de los servicios secretos y un policía de Dallas) que han sido alcanzados por los disparos efectuados contra Kennedy, han muerto. Según las primeras indicaciones, el presidente fue alcanzado en la sien derecha.
Más detalles
Tres tiros han sido disparados contra la caravana de automóviles del presidente norteamericano, cuando pasada por el centro de la ciudad de Dallas. Los motoristas de la escolta de Policía desmontaron rápidamente de sus vehículos y se dispusieron a proteger al jefe del Estado y al gobernador de Tejas, mientras corrían hacia el lugar de donde partieron los disparos.
Las esposas respectivas de los dos gobernantes iban en el coche sobre el cual se efectuaron los disparos. Ambas mujeres iban inclinadas sobre sus maridos cuando el automóvil corría hacia el hospital donde han sido internados.
Mrs. Kennedy estaba de rodillas sobre el piso del coche, con la cabeza inclinada hacia el presidente.
El vicepresidente de la República, Lyndon B. Johnson, ocupaba un coche que iba inmediatamente detrás del del presidente. Johnson, con varios de los policías de la escolta, se apresuró a acompañar al coche con el presidente herido al centro sanitario.
En la rauda carrera hacia el hospital, la cabalgata de la Policía motorizada atronaba las calles céntricas de Dallas con el sonido de sus sirenas abriendo paso. Se ha dado la circunstancia que esta ha sido la vez que más gente se ha apiñado en las calles para saludar al primer mandatario. Se calcula en doscientas cincuenta mil la cantidad de personas alineadas en las calles por donde había de pasar la caravana automovilística presidencial.
Pocos minutos después del atentado, el contralmirante George Burkley, médico de la Casa Blanca, se personaba en el hospital donde se asistía ya al presidente Kennedy y al gobernador Connally.
Parece ser que los disparos se produjeron en unos segundos. La Policía apenas tuvo tiempo de reaccionar. Un agente del servicio secreto de la Policía federal ha manifestado que los tres disparos, muy rápidos, al parecer de arma corta automática, sonaron por el lado derecho del automóvil del presidente.
El Gobernador de Tejas, operado
El Gobernador de Tejas, John Connally, que acompañaba al presidente en el mismo automóvil en el momento del atentado que ha costado la vida al primer mandatario norteamericano, ha sido sometido a una intervención quirúrgica de urgencia en el hospital de Parkland, de Dallas. El gobernador había recibido varios impactos de bala en el pecho. Su estado de considera ahora "satisfactorio".
¿Desde una ventana?
Los disparos efectuados contra el automóvil descubierto del presidente Kennedy parecen haber sido hechos desde una ventana del segundo piso de un edificio.
El jefe de la Policía federal norteamericana, J. Edgar Hoover, ha ordenado una movilización general de sus agentes y la inmediata búsqueda del asesino o asesinos autores del atentado contra la vida del presidente de los Estados Unidos.
El primer mandatario recibió el disparo en el cruce de dos calles principales, situadas en el centro de la población de Dallas y en plena zona comercial de la ciudad.
Al instante de sonar las detonaciones (al parecer de rifle), la cabeza del presidente cayó hacia atrás, quedando hundida en el mullido del respaldo del asiento que ocupaba.
Aparece un rifle 303
La emisora de televisión NBC informa que un agente de la Policía se ha incautado de un rifle 303, de fabricación británica, vendido en Estados Unidos como arma de caza.
El rifle, que tenía adosado un dispositivo telescópico, fue encontrado cerca de la esquina del edificio desde cuya ventana fueron hechos los disparos que han puesto fin a la vida del presidente Kennedy. Sobre el suelo se han encontrado tres cápsulas vacías.
Entereza de la señora Kennedy
La señora Kennedy ha demostrado gran entereza y dominio de sus servicios al entrar en el hospital con su moribundo esposo. Sus vestidos estaban manchados con la sangre del presidente. Al producirse el atentado, la señora Kennedy lanzó un grito desesperado mientras su esposo caía sobre sus rodillas.
Traslado a Washington
El cadáver del presidente Kennedy ha sido sacado del hospital de Dallas (donde ha expirado) a las 21,05 horas (hora española), en un auto-ambulancia que llevaba las cortinillas bajadas. Mrs. Jacqueline Kennedy iba en este coche, junto al cuerpo sin vida de su esposo. Dos motoristas de la Policía escoltaban el vehículo santiario.
De fuente autorizada se ha declarado que el cadáver del presidente Kennedy será llevado a la capital federal probablemente esta misma madrugada.
El féretro que guarda el cuerpo del presidente Kennedy fue bajado del avión un minuto después de que éste se detuviera en la pista de aterrizaje.
Después, a Boston
El cuerpo del presidente Kennedy será trasladado a la gran rotonda del Capitolio, donde la muchedumbre podrá desfilar ante sus restos, según anuncian fuentes allegadas al Congreso.
Las ceremonias fúnebres tendrán lugar, probablemente, en Boston, la ciudad natal del presidente muerto. La fecha fija de los funerales será determinada por la familia del presidente, actualmente reunida en Hyannis Port.
La señora Kennedy y Johnson, a Washington
El presidente Lyndon B. Johnson ha salido de Dallas con destino a Washington, a bordo del avión presidencial, inmediatamente después de prestar juramento. Va acompañado de su esposa, de la señora Kennedy y de numerosos altos funcionarios de la Casa Blanca.
Emoción en todo el país
Mientras que la Policía adoptaba medidas extremadamente severas en Dallas para descubrir al asesino o asesinos, la emoción se ha apoderado de la ciudad y se ha extendido por todo el país.
En Washington, donde los servicios de Prensa de la Casa Blanca no tenían otra información que la facilitada por las agencias informativas de Prensa, el Congreso ha aplazado su sesión. En los despachos, numerosas secretarias han roto a llorar al tener conocimiento de la muerte de Kennedy.
La próxima semana iba a ser grande para la familia Kennedy
La hija mayor del presidente Kennedy, Carolina, que cumplirá seis años el próximo miércoles, y su hermano John, que cumplirá tres el lunes, se encontraban en la Casa Blanca cuando su padre, el presidente John F. Kennedy, fue asesinado.
Se cree saber que la madre de los niños, la señora Jacqueline Kennedy, será la que habrá de encararse con la difícil tarea de hacer comprender a los niños la terrible desgracia que se ha abatido sobre la familia.
Es un detalle emotivo que todo estaba preparado para la próxima semana, que habría de ser una semana grande para los Kennedy. Se pretendía celebrar el aniversario del nacimiento de John junior (que es el día 25 de noviembre), aunque la fiesta tendría lugar el martes, para acoger en la Casa Blanca a los amiguitos del niño. También se habían hecho planes para la fiesta de cumpleaños de Carolina, que habría de celebrarse el miércoles.
Hoy, sábado, será expuesto en la capilla ardiente
La Casa Blanca ha anunciado que el cadáver del presidente Kennedy será expuesto en la capilla ardiente instalada en la habitación oriental de la mansión presidencial hoy, sábado, desde las diez de la mañana a las seis de la tarde.