Cuando parecía que el culebrón de la Casa Museo del Carnaval había tocado a su fin, de repente se anuncia un nuevo capítulo. Una de las cláusulas del convenio que, si nada se tuerce, deben firmar próximamente la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Cádiz para definir nuevos usos para los solares y edificios sin contenido que tiene la Administración autonómica en la ciudad incluye a la plaza de la Reina como moneda de cambio en una operación de permuta rocambolesca que se resume en que el Ayuntamiento cede a la Junta una parcela en el entorno de la estación de bombeo de La Martona para la construcción de un edificio administrativo (que sale del proyecto del solar de la antigua Residencia de Tiempo Libre) y, a cambio, le entrega al Gobierno de la ciudad la plaza de la Reina.
Se replanteará devolver el proyecto a su ubicación original
Por eso la alcaldesa anunció que se iba a modificar el Plan General de Ordenación Urbana para cambiar el uso del suelo de la plaza Guerra Jiménez, donde se decidió trasladar el proyecto por ser suelo municipal y gratis. Hasta se presentó un nuevo diseño del Museo con forma de batea que generó muchas críticas.
No obstante, al desaparecer el principal escollo para desarrollar el proyecto en La Viña, que era la titularidad del suelo, todo apunta a que el equipo de Gobierno se replanteará devolver el proyecto a su ubicación original. Después de todo, el trabajo en Guerra Jiménez no había avanzado más allá del papel.
Incluso el nuevo diseño había sido realizado por los arquitectos municipales, con lo que no se hecho ninguna gran inversión para obtenerlo. Todo dependerá, eso sí, de que el acuerdo se firme y esto suceda pronto, porque la Casa Museo del Carnaval acumula ya demasiado retraso.