La crisis está pasando factura a la fábrica de Nissan en Barcelona. / Archivo
El comité de empresa volverá a convocar movilizaciones para lograr que el reajuste que plantea la compañía se lleve a cabo sin despidos forzosos
La dirección anunció en octubre que tenía un excedente de 1.680 personas
La dirección de Nissan ha presentado al comité de empresa un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 581 trabajadores de las plantas de Barcelona, al no haber logrado reducir el excedente de 1.680 personas anunciado el pasado mes de octubre a través de las
medidas no traumáticas pactadas.
Ambas partes han mantenido hoy una última reunión negociadora en la que la compañía ha comunicado oficialmente su intención de presentar ante la autoridad laboral este expediente, que llega tras ocho meses de intensas
negociaciones.
El comité de empresa, que ha acusado a Nissan de romper el diálogo y la mesa de negociación, ha expresado su rechazo a este ERE y ha anunciado que volverá a convocar movilizaciones para lograr que el reajuste de plantilla que plantea la compañía se lleve a cabo sin despidos forzosos.
El portavoz de la compañía, Alfredo Castaño, ha asegurado que la prioridad de la multinacional ha sido siempre "minimizar el impacto" del reajuste de plantilla con medidas no traumáticas, aunque ya "no dispone de más tiempo". Nissan justifica el expediente por causas económicas, organizativas y de producción aunque en la reunión de hoy, la multinacional nipona ha planteado el posible reingreso de 150 empleados, en función de las cargas de trabajo.
Ocho meses de negociaciones infructuosas
En octubre de 2008, el consejero delegado de Nissan Motor Ibérica, Fumiaki Matsumoto, anunció la intención de la compañía de despedir a 1.680 trabajadores de las plantas de Zona Franca y Montcada i Reixac, con el objetivo de redimensionar la plantilla en 2.800 personas, el nivel que considera óptimo para garantizar su viabilidad. El fuerte rechazo que generó esta medida llevó a la empresa a reconvertir los despidos en un ERE temporal, y desde entonces ha puesto en marcha un plan de prejubilaciones, bajas incentivadas e indemnizaciones.
La puesta en marcha de todas estas medidas no ha permitido reducir totalmente el sobrante de 1.680 personas de las plantas catalanas de Nissan, por lo que la empresa "se ha visto obligada" a presentar un expediente para 581 personas. Sin embargo, los sindicatos no descartan que el número de afectados por el expediente crezca en las próximas semanas, en función de la marcha de las medidas no traumáticas, según ha explicado el responsable de USOC, Pedro Ayllón.
La empresa, por contra, está convencida de que en los próximos días más trabajadores se adherirán a las medidas y se cubrirán todas las plazas, por lo que es posible que se reduzca el número de afectados por el ERE, a quienes la compañía ofrece una indemnización de 33 días por año trabajado, con un mínimo de 12.000 euros y un máximo de 90.000.
Jordi Carmona, de UGT, ha lamentado que la empresa haya decidido romper la mesa de negociación y presentar un nuevo ERE que, pese a ser casi tres veces menor que el inicial, de 1.680 personas, reabre el conflicto laboral en la empresa. También CCOO ha rechazado el ERE y ha pedido a Nissan que mantenga abierta la mesa negociadora.