Decenas de salvadoreños esperan el repique de las campanas de la iglesia de Texistepeque, el pistoletazo de salida para que 35 hombres, látigo en mano, se desplieguen por las calles. Con el látigo golpean indiscriminadamente a los espectadores para, dicen, expiar pecados, a razón de uno por azote. Otro hombre interpreta a Jesucristo y se enfrenta a los diablos que van cayendo, postrados boca abajo ante su presencia. La tradición desapareció en 1932, pero fue recuperada en 1935 por Urbano Sandoval, un ciudadano de Texistepeque que reimpulsó el festejo religioso.
© LVCD S.L.U.
Registro Mercantil de Cádiz, Tomo 1753, Libro 0, Folio 192, Hoja 30410 Inscripción 1ª C.I.F.: B-72000888 Domicilio social en Glorieta de la Zona Franca, Edificio Glorieta s/n 4ª Pta.
Correo electrónico de contacto: digital@lavozdigital.es Copyright © LA VOZ DE CADIZ DIGITAL S.L, CADIZ., 2008.
Incluye contenidos de la empresa citada, del medio LA VOZ DE CADIZ (CORPORACION DE MEDIOS DE CADIZ S.L.), y, en su caso, de otras empresas del grupo de la empresa o de terceros