Diego trabaja como controlador del SER en el barrio de Fuencarral, al norte de Madrid. Ahora está de baja laboral. Recibió una paliza de unos individuos cuyo coche multaba por no tener el billete de estacionamiento. Los tres agresores le golpearon con brutalidad igual que a su compañera, que también intentó defenderse. En la zona de Fuencarral estos enfrentamientos son frecuentes también. Para protegerse los controladores de parquímetros trabajan en parejas y tienen una lista de los coches conflictivos. A algunos ni siquiera se atreven a multarlos. Después de la agresión se ha suspendido temporalmente...