Unas 30 alumnas han sido mandadas a casa en un colegio de Girona al no acudir a clase con la indumentaria adecuada. Se trata de estudiantes de primer y segundo de bachillerato que tuvieron que vestirse con las prendas de deporte que llevaban en la mochila, llamar a sus tutores o incluso ir a comprarlas. Algunos padres se han mostrado molestos con la actitud del centro y con que se obligase a las chicas a ir a buscar ropa en vez de avisarles la primera vez. El claustro y el consejo escolar aprobaron en junio aque el uniforme es obligatorio desde primero de primarias...