Malleolus: espléndido, tal vez

Si todo fuera como escriben que es. Si todo sucediese como lo quisieran ver. Si todo quedase en grandeza, cuando es incierta madurez. Si todo se tradujese por vino grandioso, entonces… ¿un crítico, que tendría que hacer? Si ciertos partidos de fútbol se titulan como el partido del siglo un año y otro también, sobramos todos los humanos. Y, por supuesto, los demás también y también. Esto no es un juego, de viñas viejas cuando quizá los veinticinco años los acaban de ver. Y lo escribe la bodega, que utiliza las palabras «extraordinaria» y «excepcional» casi a la vez. Se trata de otra cosa, de otra cuestión que es. Y eso se traduce por no tapar una sobresaliente fruta negra con una barrica fetén. Lo que importa es el viñedo, y por supuesto esa añada que incluso admito la palabra gloriosa si en la viña la supieron entender. Lo que importa es el vino en la boca, cuando es secante, cuando no debiera ser. Aunque al final queda la sensación de un Malleolus, que es como se llama este vino, espléndido para beber. Aunque consignemos los reparos. Aunque lo que queda es un gran vino que debiera ser mejor. Tal vez.

Puntos: 93. Precio: 28 euros. Añada: 2011. Origen: D.O. Ribera del Duero. Variedad: tempranillo. Bodega: Emilio Moro. Pesquera de Duero (Valladolid). Tel: 983 878 400. www.emiliomoro.com